Miles de personas salen a la calle en diferentes puntos de España para denunciar "el ataque brutal que sufren las pensiones"

La inflación se ha moderado en España y se queda en el 7,3 por ciento, aunque los precios de los alimentos siguen en ascenso. Han subido ya más de un 15 por ciento en el 2022. De momento los salarios no crecen igual. Para exigir la actualización de las pensiones y los sueldos con arreglo al IPC real, miles de pensionistas han salido a la calle en varios puntos de la geografía española como ya hiciesen en Madrid hace un mes. Reclaman que el Gobierno tenga en cuenta la situación actual para que no se devalúen los ingresos de las familias más humildes.

Los pensionistas se han manifestado en Madrid para defender los derechos y las pensiones públicas, ya que "las leyes que se intentan desarrollar introducen reformas negativas para la ciudadanía", según ha señalado a Europa Press el portavoz de la Coordinadora Estatal Pensionistas, Damián Rodríguez. También lo han hecho en Barcelona y Málaga.

Asimismo, han lamentado que "las pensiones estén sufriendo un ataque brutal por parte del capitalismo", tal y como ha asegurado el secretario general de la Confederación Territorial Madrid-CLM-Extremadura de la CGT, José Antonio García de Merlo, durante la manifestación en Madrid que ha reunido a unas 1 500 personas, según los datos de la Delegación del Gobierno.

Las organizaciones de pensionistas ya realizaron una movilización similar en Madrid el pasado 15 de octubre y ahora se ha realizado a nivel estatal. Damián Rodríguez ha defendido estas acciones porque persiguen que no se pierden más derechos.

"Pedimos defender los derechos y las pensiones públicas; recuperar el poder adquisitivo de pensiones y salarios; la desaparición de la brecha de género; y medidas que garanticen que el IPC real sea subido para no perder poder adquisitivo ante las circunstancias de emergencia social del país", ha destacado.

En este sentido, ha achacado que los políticos "intenten escapar de la presión de la calle", a pesar de haber "un panorama económico muy turbio", y ha criticado el futuro esplendoroso de las grandes compañías, que tienen un presente "extraordinario".

"Ya está bien de tanta ganancia de los buitres leonados, de la banca y entidades privadas. Pedimos que el Gobierno posibilite mantener las condiciones del estado del bienestar del que hemos gozado en los últimos años", ha recalcado.