El 45,3% de los españoles considera que la presencia del rey emérito en el funeral de la reina Isabel II fue "positiva", lo que supone un respaldo mayoritario a la decisión del monarca de acudir, al igual que la reina Sofía al sepelio. La cita produjo además una imagen que no se repetía desde que Juan Carlos de Borbón dejó España en 2020, la de el rey emérito y la reina Sofía sentados junto a Felipe VI y la reina Sofía. Una imagen que parece que la Casa Real española ha querido evitar hasta el momento.
Según los datos recabados por GAD 3, el 26,7% de los encuestados se mostraron "indiferentes" ante la presencia del monarca español en el funeral, y el 24,8% vieron su asistencia, tras la invitación formal de la corona británica como exjefe del Estado español, como una imagen negativa. Entre las distintas filiaciones políticas de los encuestados, el rechazo a la decisión del rey emérito de participar en el funeral en Londres fue mal vista por más de la mitad de los votantes de Unidas Podemos o los partidos independentistas, mientras son los simpatizantes de Vox, Partido Popular y Ciudadanos quienes apoyan de forma mayoritaria la decisión, llegando en el caso de la formación de Santiago Abascal a una percepción positiva del 76%.
Preguntados además por el efecto que el fallecimiento de la histórica reina Isabel puede tener tanto en la monarquía española como en la británica, el 48,1% de los encuestados considera que la muerte de la reina inglesa no tendrá repercusión alguna en el apoyo que en la actualidad recibe la Casa Real española. Por el contrario, el 47,7% considera que la población británica sí reducirá su apoyo a la corona con Carlos III como nuevo monarca. La afección en el apoyo al resto de las monarquías europeas se mantendrá igual para el 41,2% de los encuestados, se reducirá tras la muerte de Isabel II para el 27,1% de los encuestados y subirá para el 9%.
Así, los números reflejan un apoyo mayoritario a la presencia de Juan Carlos I en el funeral de la reina británica, que supuso la presencia en público del rey emérito por primera vez junto a su hijo desde su salida de España para residir en Emiratos Árabes Unidos. La decisión llegó después de que los encargados de Protocolo de la corona inglesa decidieran sentar a los dos junto a la reina Sofía y la reina Letizia. Una imagen que no se dio siquiera cuando Juan Carlos I regresó a España el pasado 22 de mayo para disfrutar de las regatas en Sanxenso.