Este 19 de septiembre se cumple un año desde que comenzó la erupción del volcán de La Palma. Tras días de incertidumbre e inquietud, la explosión tuvo lugar a las 15:15 de la tarde, hora local canaria, y se dio por finalizada el 25 de diciembre, tres meses después.
Los efectos del devastador volcán son todavía evidentes un año después en la isla. La isla sigue todavía en semáforo amarillo de riesgo volcánico. Los expertos aseguran que esta situación es normal hasta que desciendan los niveles de sismicidad y también los gases, que a día de hoy mantienen a más de 1.000 personas lejos de sus casas.
El ministro de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños, ha asegurado, desde Santa Cruz de La Palma, que "los focos se han apagado y el Gobierno no se olvida de La Palma y no se va a olvidar hasta que el último palmero no reconstruya su proyecto de vida". Y añadió que el 80% de los 600 millones de euros que el Gobierno destinó a paliar los efectos del volcán ya han sido movilizados.
"Cuando vienen mal dadas, ahí hay un gobierno progresista que está para ayudar a la gente", ha remarcado Bolaños, que ha recordado que los ministros han visitado La Palma 50 veces y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha viajado una decena de veces a la isla. Agregó que a Canarias "le viene bien" que haya un presidente socialista en el país "frente a un Partido Popular con líderes como Casado, que proponía bajar el IVA o un Feijóo que recomienda utilizar un medio de transporte entre las islas desaparecido hace años".