Desde Rusia hasta Madrid, la noticia no ha dejado de propagarse y difundirse a través de las redes sociales: el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, ha caído en la trampa de los humoristas rusos Vovan y Lexus, quienes se hicieron pasar por el alcalde de Kiev, Vitali Klitscko, durante una entrevista que se extiende más allá de los 15 minutos y que compartieron y divulgaron en la Red. Con la guerra de Ucrania y el conflicto ruso como tema central, tampoco dejaron pasar la ocasión para mofarse con preguntas comprometedoras, entre las cuales recuerdan desde la polémica de las mascarillas hasta su vídeo viral dando sin querer un pelotazo a un niño mientras lanzaba un penalti. Entre otras, también le preguntaron con descaro por el mote con el que algunos de sus detractores se refieren a él, algo que dio paso al fin de la entrevista y que, en suma, motivó que el Ayuntamiento de Madrid, reconociendo los hechos, interpusiese una denuncia a la policía, señalando que todo forma parte de una “estafa múltiple de las herramientas de propaganda rusa”.
El Ayuntamiento subraya que “no va a dar pábulo a ninguna de las estrategias desestabilizadoras de Rusia”, según fuentes del consistorio consultadas por EFE, pero la realidad es que la entrevista, que se produjo a finales de junio, ya está en boca de todos, con múltiples voces preguntándose cómo Martínez-Almeida y su equipo no se dieron cuenta antes de que le estaban tomando el pelo, y de un modo que cada vez fue resultando más hiriente para el regidor.
Durante la entrevista, los humoristas buscaron poco a poco comprometerle y ponerle en más de un aprieto. Así, por ejemplo, llegaron a preguntarle si Madrid podía ayudar a “deportar a Ucrania a los hombres con ciudadanía ucraniana”, algo a lo que Almeida contestaba: “Madrid apoya el envío de ucranianos a Ucrania para que participen en las hostilidades. Allí se necesitan más soldados para luchar contra Rusia”, dijo, y se llegó a referir a los de Putin directamente como “russians bastards”, es decir, ‘bastardos rusos’, a la hora de hablar de la necesidad de “castigarlos aquí en España y en Madrid”.
Más allá, en un momento de la conversación le llegan a decir que pretenden hacer una ‘performance’ durante la cumbre de la OTAN consistente en manifestarse desnudos y lanzar heces a la cara de los participantes, llegando a añadir que el propio embajador (de Ucrania) estaría desnudo. “No sé nada sobre eso. ¿Vuestro embajador? Es muy valiente”, dice Almeida al escucharlo, antes de que le digan que puede “unirse a la acción”. -“No estoy tan seguro de mi figura”, contesta Almeida entonces, sorteando la cuestión.
Tras ello, continuaron con preguntas en torno al Orgullo Gay, haciéndole creer que Stepán Bandera, figura histórica ensalzada por la extrema derecha de Ucrania, era un héroe nacional ucraniano y un icono en la comunidad LGTBI. “Me gustaría que el festival llevara el nombre de Bandera en Madrid”, le dijeron los humoristas, y Almeida, asintiendo, tras señalar que mantienen “una relación muy estrecha con la embajada y personalmente con el embajador”, escuchaba después cómo los humoristas añadían que el batallón de Azov “tiene muchos gays” entre sus integrantes.
Tras insistirle en Bandera como icono gay, y hacerle ver a Almeida que ya falleció (en 1959), ante lo cual en su desconocimiento el alcalde ofrecía sus condolencias, el regidor llegaba a ofrecerles incluso invitaciones a la cumbre de la OTAN o al propio Orgullo: “Lo siento. Lo siento Es una pena. Pero si quieren, puedo invitarte a la cumbre de la OTAN o al desfile del Orgullo Gay en Madrid, en dos semanas. Sería una oportunidad para explicar la situación de Ucrania y la comunidad gay en Ucrania”, les dijo.
La última parte de la entrevista, en la que entran en lo personal y le preguntan por su mote, escala el tono súbitamente, pasando del descaro a lo plenamente ofensivo, con lenguaje ya explícitamente soez. En ese momento, Almeida, que mira hacia otras personas que parecen estar presentes en la misma habitación, termina resolviendo la entrevista para darla por finalizada.
El pasado 25 de julio, el Ayuntamiento de Madrid ya informó de que había puesto la denuncia y de que había alertado al alcalde de Kiev. En las fechas en que se produjeron los hechos, los humoristas rusos Vovan y Lexus afirmaron a la televisión pública alemana ARD estar detrás de la serie de videollamadas a alcaldes europeos. También fueron víctimas la regidora de Berlín, Franziska Giffey,y los de Budapest, Varsovia y Viena. En cada caso, se hicieron pasar por el regidor de Kiev, capital de Ucrania.
El dúo de humoristas, formado por Lexus y Vovan –Vladímir Krasnov, conocido también con el apellido Kuznetsov– ya anunció que iba a colgar en las redes las grabaciones en vídeo de lo que consideran como “bromas”.
Además, no es la primera vez que actúan así. Con anterioridad también engañaron en llamadas similares a distintas celebridades y políticos, entre ellos al primer ministro británico, Boris Johnson, y en 2017 en España a la entonces ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, a la que aseguraron ser miembros de Ministerio de Defensa de Letonia que advertían de que Carles Puigdemont era un espía ruso.