La compañía Renfe reducirá un 50% los precios de sus billetes en la línea Badajoz-Madrid-Badajoz hasta que resuelva los problemas técnicos y tecnológicos de los trenes Alvia S-730 que cubren esta línea y que, según su presidente, Isaías Táboas, "no habían sido detectados hasta ahora".
La "anomalía", registrada en la "tarjeta del disyuntor", que reduce la velocidad del tren cuando aprecia un sobrecalentamiento, "no fue detectada en el periodo de pruebas" de la nueva plataforma ferroviaria extremeña "ni en los diez años" que este tipo de trenes llevan funcionando.
"Lo estamos analizando con el fabricante para buscar soluciones", ha afirmado Táboas durante una comparecencia de prensa conjunta con la presidenta de ADIF, María Luisa Domínguez, ofrecida en Mérida.
Táboas y Domínguez se han desplazado a la capital extremeña para mantener una reunión de trabajo con la consejera regional de Movilidad, Leire Iglesias, y analizar las incidencias diarias que registra el nuevo servicio ferroviario extremeño desde su inauguración el pasado martes.
Una reunión que ha tenido lugar después de que el presidente de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, señalara que las continuas incidencias son "una vergüenza o una desvergüenza" que se debe resolver o, de lo contrario, los responsables "se tienen que marchar".
Tras pedir disculpas a la sociedad extremeña por no cumplir con los tiempos de viaje anunciados por Renfe en la puesta en marcha de la primera fase de la nueva plataforma de Alta Velocidad entre Extremadura y Madrid, la referida al tramo Badajoz-Monfragüe, Táboas ha anunciado que la compañía ajustará la duración del viaje "con unos pocos minutos más" atendiendo a la situación del servicio para que la información al viajero sea real.
Táboas ha indicado que los trenes Alvia son de "lo mejor que tiene Renfe", pues "llevan años circulando con toda satisfacción por otras líneas de España y tienen una fiabilidad de 175.000 kilómetros entre avería y avería".
Sin embargo, en Extremadura, con tramos que tienen "pendientes más exigentes", unido a las altas temperaturas climatológicas que no ayudan a la refrigeración", hemos detectado que el sistema, al ver que hay un sobrecalentamiento y para proteger el motor, ralentiza la velocidad y hace que el tiempo de viaje sea superior al ofertado.
A preguntas de los periodistas de si debe haber alguna dimisión o cese en el seno de Renfe o ADIF ante esta situación, Táboas ha dicho que su trabajo es poner soluciones.
Domínguez ha explicado que en la infraestructura ferroviaria se han producido cuatro incidencias que han provocado retrasos significativos. Tres de ellas están relacionadas con las agujas o sistemas de desvío en la línea y uno tiene que ver con un fallo en la cometida eléctrica.
Para dar solución a estas cuestiones, una brigada de la línea AVE Sevilla-Madrid está reajustando y comprobando el motor, y ADIF ya ha reforzado las brigadas y el personal de mantenimiento.
"Somos conscientes de las molestias" causadas, ha reconocido Domínguez, añadiendo que "son incidencias que en los ajustes de cualquier entrada en servicio pueden ocurrir, pero se han acumulado de forma excepcional".
Preguntada si la nueva línea ferroviaria extremeña, a raíz de este cúmulo de incidencias, estaba preparada al 100% para ser inaugurada, Domínguez ha manifestado que se han cumplido todos los protocolos de seguridad, con sus respectivas pruebas de fiabilidad tanto de infraestructuras como de señalización.
El tren Alvia de Badajoz a Madrid, que entró el pasado martes en funcionamiento, ha vuelto a sufrir este viernes, por cuarto día consecutivo, una demora de una hora y 14 minutos, ya que ha llegado a la estación de Chamartín a las 13:14 horas.