¿Cómo se financian las campañas electorales en EEUU? Carlos Franganillo analiza las diferencias con España

Las elecciones en Estados Unidos acaparan el centro de atención en la política internacional a escasos días de su celebración. El próximo 5 de noviembre, Donald Trump y Kamala Harris se enfrentarán en las urnas que decidirán quién será el próximo inquilino de la Casa Blanca. 

Para entender estos comicios y no perderse entre tantos datos, Carlos Franganillo está dispuesto a explicar todas las claves de las elecciones de Estados Unidos. En la cuarta entrega de la sección 'Lo que tienes que saber', el director de Informativos Telecinco analiza las diferentes vías de financiación de las campañas electorales. 

Tal y como señala Franganillo, el modelo de financiación de las campañas norteamericanas presenta grandes diferencias con respecto al español, principalmente por la gran cantidad de dinero que se mueve. "En 2020 fueron más de 14.000 millones de dólares y este año ya se ha superado esa cifra. Además, cada elección se va superando", apunta.

Es mucho dinero el que hay que gastar en diferentes frentes, como propaganda, anuncios de televisión o redes sociales. "El dinero se concentra en los llamados 'swing states', aquellos en los que aún no hay nada decidido y los que condicionarán el resultado final", añade el periodista. 

Este año son siete: Arizona, Nevada, Carolina del Norte, Georgia, Wisconsin, Michigan y Pensilvania. Ahí es donde se juega la mayor parte del dinero de los candidatos. Este dinero se destina a contratar a personal para la campaña, organizar mítines y encargar sondeos, pero ¿cómo se hace todo eso?

Tal y como señala Franganillo hay diferentes vías de financiación. Por un lado, las individuales con límites establecidos por las autoridades. "Si uno quiere apoyar a su candidato puede donar hasta un nivel de dinero, hasta los 3.300 dólares", subraya. 

Por otro lado, están los Comités de Acción Política, los denominados PACs. También tienen límites y no se pueden superar determinadas cifras, además, pueden coordinarse con las campañas electorales. "Esos PACs están coordinados por grupos de interés, como empresas que quieran recaudar dinero para apoyar a un candidato o para organizar campañas contra otro". 

Por último, están los llamados súper PACs. "No tienen ningún límite económico, pueden hacer donaciones sin ningún tope. Es el caso de las grandes fortunas y las grandes corporaciones que quieren apostar por una candidatura. En teoría no se pueden coordinar con los candidatos", concluye Franganillo. 

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