Prepárate: esta semana va a ser dura. Con un setenta por ciento del territorio español en riesgo por altas temperaturas, se prevén máximas que pueden superar los 40ºC en algunos puntos del suroeste y del noreste, concretamente en Extremadura y Aragón, respectivamente. Por eso desde hace unos días se habla mucho de que estamos ante la segunda ola de calor del verano. ¿Es así? La respuesta corta es no, pero hay letra pequeña.
Cuando hablamos de ola de calor en términos meteorológicos, nos referimos a un episodio "de al menos tres días consecutivos, en que como mínimo el 10% de las estaciones consideradas registren máximas por encima del percentil del 95% de su serie de temperaturas máximas diarias de los meses de julio y agosto del periodo 1971-2000", tal y como especifica la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Es decir, que hay que observar las temperaturas alcanzadas, la duración y el territorio afectado.
Si observamos los mapas de anomalías observamos que, aunque una buena parte del país va a estar en riesgo por calor –casi el 70% del territorio–, las máximas no van a estar muy por encima de lo normal excepto en el cuadrante noreste peninsular. Por eso, no podemos hablar de ola de calor en todo el país, pero sí en el valle del Ebro. Destacan Navarra, La Rioja y País Vasco, donde desde este lunes se han activado los avisos naranjas hasta, al menos, el miércoles (no se descarta que el jueves sigan en riesgo por calor), por máximas que pueden alcanzar los 41ºC.
También destacan las temperaturas mínimas, que tal y como explica la meteoróloga Rosalía Fernández, "serán también muy cálidas, con noches tropicales tanto en zonas del interior como noreste peninsular". Recordemos que noches tropicales son aquellas en las que el mercurio no baja de 20ºC en todo el día, ni siquiera en las horas más frescas.
*Imagen: temperaturas mínimas previstas para el miércoles iguales o superiores a 20ºC / @crballesteros
Cuando se produce un episodio de este calibre la Aemet publica un aviso especial o una nota informativa dando algunos detalles. En este caso, de momento la agencia meteorológica no se ha pronunciado, cuyos motivos nos explica Delia Gutiérrez, portavoz del centro: "A pesar de que los requisitos de duración y extensión se cumplen, las condiciones de intensidad están muy en el límite, pues las zonas afectadas no es claramente suficiente para hablar de forma generalizada de zona de calor. Lo que sí podemos confirmar desde ya es ola de calor en el valle del Ebro".
Eso no quiere decir que en un futuro no hablemos de ola de calor, sino que de momento no se puede confirmar. Será después de que pase, con los datos sobre la mesa, cuando se pueda hacer balance y determinar si realmente esto puede considerarse una ola de calor... o no.