La cifra de víctimas mortales por las inundaciones en el oeste de Alemania y el sur de Bélgica aumenta con el paso de los días, a medida que se retiran las aguas y aparecen los cuerpos de muchos de los miles de desaparecidos. Hasta el momento, se han confirmado más de 190 fallecidos.
La Policía de Alemania ha informado este viernes de que al menos 163 personas han muerto en los estados de Renania del Norte-Westfalia y Renania-Palatinado, los más afectados del país con 46 y 177 fallecidos, respectivamente. También habría al menos una víctima en Baviera, y 31 en Bélgica.
"El temor es que haya más", ha dicho un portavoz de la Policía al diario 'Die Welt'. Los datos indican que por el momento una veintena de personas habrían muerto en la ciudad de Colonia, si bien otras 15 lo habrían hecho en Euskirchen. Además, más de 30 habrían fallecido en el distrito de Ahrweiler, el más afectado.
Asimismo, las autoridades de Ahrweiler han confirmado que 1.300 personas continúan en paradero desconocido, si bien esperan que muchas de ellas estuvieran de vacaciones. Además de las víctimas y desaparecidos, las inundaciones han provocado graves destrozos en vías y puentes, así como problemas en la red de telefonía móvil, lo que ha dejado a la población de la zona incomunicada.
La canciller alemana, Angela Merkel, ha trasladado su pésame a las víctimas y familiares y ha expresado que está "impactada por los informes de que hay lugares que están completamente bajo el agua". "No sabemos el número todavía de víctimas y afectados, pero habrá muchos", ha lamentado.
El ministro principal de Renania-Palatinado, Malu Dreyer, ha aseverado el alcance exacto del desastre aún no es previsible. "El sufrimiento sigue aumentando", ha dicho antes de pedir tomar medidas para frenar el cambio climático. "Cualquiera que aún no haya entendido que el cambio climático tiene sus consecuencias no puede ser ayudado", ha recalcado.
Mientras tanto, los rescatistas continúan la búsqueda de personas desaparecidas. La Bundeswehr ha enviado alrededor de 900 efectivos a las áreas de desastre para brindar apoyo.
En el distrito de Euskirchen un experto examinará de nuevo la presa de Steinbach a lo largo de la jornada y después de haber sido declarada como "muy inestable". El nivel del agua había bajado el jueves por la noche debido al bombeo.
Este mismo viernes, el Gobierno turco ha expresado a su vez sus condolencias por la muerte de decenas de personas a causa de las fuertes lluvias. En un comunicado, el Ministerio de Exteriores ha trasladado su "tristeza" por la "pérdida de vidas humanas" y el alto número de desaparecidos.
"Extendemos nuestras más sinceras condolencias a los familiares de aquellos que han perdido la vida, así como a la gente y al Gobierno de Alemania", recoge el texto.
Las autoridades turcas han deseado una pronta recuperación a todos los heridos y han dicho que esperan que las personas en paradero desconocido sean localizadas o rescatadas lo antes posible.
El temporal también está afectando a Bélgica, donde han fallecido al menos 23 personas y cuatro han desaparecido, según informaciones del diario 'Le Soir'. En la región de Valonia, en el sur del país, unos 41.000 hogares se han quedado sin suministro eléctrico, por lo que las autoridades han anunciado la liberación de fondos de emergencia para ayudar a las poblaciones afectadas.
Las autoridades han alertado de que la "situación en la red de distribución eléctrica sigue siendo extremadamente complicada". Además, la movilidad se encuentra gravemente limitada, con los servicios de trenes y autobuses suspendidos.
El gobernador de la provincia de Lieja, la más afectada, ha alertado de que el número de muertos podría aumentar. "Solo en Lieja actualmente hay 13 personas desaparecidas", ha matizado. "No sabemos nada todavía y todavía no podemos dar una cifra definitiva", ha insistido.-