El huracán Katrina, la mayor catástofe natural de Estados Unidos
Marcos Fernández* | Meteoralia
30/08/201510:27 h.Y es que este huracán, que tocó tierra con fuerza F4 marcó un antes y un después en el historial de catástrofes naturales que han golpeado Estados Unidos a lo largo de la historia. Para encontrar un precedente similar de destrucción nos tenemos que remontar al año 1928 cuando el huracán San Felipe II tocó tierra. Desde entonces jamás se había registrado un huracán tan potente y tan mortífero.
El huracán Katrina llegó en una temporada especialmente activa en el Atlántico, nada que ver con la de 2015, año en que las condiciones de El Niño apenas han permitido la formación de algunas tormentas tropicales y hasta la fecha, precisamente estos días, del huracán Danny.
El Centro Nacional de Huracanes (CHN) de Estados Unidos tuvo constancia del Katrina el 23 de agosto de 2005, formándose al sureste de las islas Bahamas con una trayectoria errática y una evolución confusa, ya que después de formarse tocó tierra en Florida alcanzando aquí la categoría de huracán en poco más de dos horas.
Cuando cruzó la Península de Florida, perdió fuerza y volvió a degradarse a su estatus inicial de tormenta tropical en el Golfo de México. Sin embargo, aquí, el Katrina se realimentó de las aguas extraordinaria e inusualmente cálidas de aquel año. Gracias a estas circunstancias excepcionales ganó fuerza para volver a convertirse en huracán por segunda vez e iniciar la embestida como el tercer gran huracán de la temporada. Fue el 27 de agosto de 2005.
Un día después, alcanzó la máxima categoría. Katrina era un F5 y se dirigía hacia Luisiana con rachas de viento superiores a los 280 km/h. Hasta entonces el más intenso de la temporada, aunque podo después lo superaría Rita.
El Katrina alcanzó las costas de Luisiana en la madrugada del 28 al 29 de agosto con fuertes lluvias e intensas rachas de viento que amenazaban con desencadenar una severa inundación en Nueva Orleans, una ciudad con ciertas particularidades que la convertían en la víctima perfecta del monstruoso huracán Katrina.
Nueva Orleans se encuentra bajo el nivel del mar, flanqueada por el río Misisipi y el lago Pontchartrain. Por esta razón, la ciudad ha vivido siempre protegida por un sistema diques que no se encontraban en su mejor estado cuando Katrina se cebó con la ciudad. De hecho, aun hoy los habitantes de esta ciudad suelen afirmar que esta no fue una "catástrofe natural sino humana".
Dicha catástrofe arrancó a las 07:45 del 29 de agosto de 2005 cuando algunos de los diques cedieron a la presión del agua caída durante toda la noche. En ese momento comenzó una inundación en diferentes distritos de la ciudad, que acabarían quedando sumergidos. Hoy una placa recuerda aquellos aciagos días en que las infraestructuras de la ciudad cedieron a las fuerzas de la naturaleza.
Un día después, el 30 de agosto, la gobernadora del estado de Luisiana, Kathleen Blanco, ordenó la evacuación de la ciudad, que posteriormente necesitó la intervención de más de 24.000 soldados y 10.000 millones de dólares para comenzar la evacuación y posterior reconstrucción, que todavía no ha terminado.
Ya como tormenta tropical azotó los estados de Misisipi y Tennessee. Los retazos de del potente huracán siguieron avanzando por el interior de Estados Unidos hasta alcanzar, a miles de kilómetros al norte de Nueva Orleans, la región de los Grandes Lagos y el sur de Canadá como tormenta extratropical.
El balance total da una imagen del alcance del Katrina con 1.800 muertos, daños económicos que se valoraron en 75.000.000.000 de dólares, 182. 000 edificios sepultados bajo la inundación y miles de personas evacuadas.