Apenas ha pasado un mes desde que conocimos una noticia preocupante: por primera vez desde que se tienen registros, llovía en el punto más alto de Groenlandia Hoy la imagen es muy diferente en buena parte de la isla, dado que la llegada del exhuracán Larry ha provocado unas copiosas nevadas que la han cubierto completamente de blanco. ¿Cómo ha llegado la rara tormenta tropical tan al norte?
Larry aparecerá en los libros de historia sin duda. Después de fortalecerse rápidamente en el Atlántico, el huracán tomó rumbo al norte y pasó muy cerca de Bermudas, para desplazarse posteriormente hacia la isla canadiense de Terranova. A medida que fue ascendiendo de latitud se convirtió en una tormenta extratropical, todavía con vientos que superaban los 160 kilómetros por hora a su llegada al aeropuerto de Kulusuk, cerca de la costa sureste de Groenlandia.
En Tasiilaq, la ciudad más grande de la región, los vientos sostenidos rozaron los 90 km/hora, con ráfagas de más de 140.
La combinación de nieve y viento generó condiciones de ventisca en Summit Camp, la estación meteorológica en el punto más alto de la isla. La visibilidad ha sido mínima desde el pasado domingo.
"El exhuracán Larry todavía nos persigue", escribió el Instituto Meteorológico Danés. Se ha convertido, sin rival, en el ciclón más prolongado de la temporada de huracanes del Atlántico de este año.
A la sorpresa de ver nieve en septiembre hay que sumar el hecho de que Groenlandia viene de un verano extremadamente cálido, con niveles de derretimiento del hielo marino preocupantes. El hecho más llamativo se produjo cuando la estación meteorológica que ahora está completamente blanca, a 3.212 metros sobre el nivel del mar, detectó lluvia en agosto cayendo durante varias horas.
Este ha sido el primer año en registrarse lluvia en Summit Camp desde que se inauguró la estación meteorológica en la década de 1980.