Episodio de La Niña en desarrollo: el fenómeno se quedará hasta febrero de 2022

Las condiciones de un episodio de La Niña se han desarrollado en el Pacífico y se espera que continúen con un 87% de probabilidad entre diciembre de 2021 y febrero de 2022. ¿En qué consiste este fenómeno que influye en el clima global?

¿Qué es La Niña?

El fenómeno que conocemos por “La Niña” se caracteriza por temperaturas inusualmente frías en las aguas superficiales del Pacífico ecuatorial oriental. En los mapas, la anomalía negativa se observa como una onda que se extiende desde Sudamérica hacia el oeste en línea recta.

Es lo contrario al episodio de “El Niño’, que ocurre cuando los vientos alisios se debilitan, lo cual termina con una mancha cálida en el Pacífico ecuatorial, lo opuesto a lo que sucede durante eventos de La Niña.

Ambos fenómenos son fases opuestas de lo que se conoce como el ciclo El Niño-Oscilación del Sur (ENSO), con La Niña denominada la fase fría de ENSO y El Niño como la fase cálida de ENSO.

La Niña reaparece por segundo año consecutivo

En el último mes, surgieron condiciones de La Niña, como lo indican las temperaturas de la superficie del mar (TSM) por debajo del promedio en el Pacífico ecuatorial central y centro-este.

Todo apunta a que La Niña continuará durante el otoño y el invierno de 2021-22. El consenso de los pronosticadores también anticipa que La Niña continuará durante el invierno, y se pronostica que ENSO neutral regresará durante marzo-mayo de 2022.

Debido al reciente enfriamiento oceánico y el acoplamiento a la atmósfera, los pronosticadores ahora anticipan un 57% de probabilidad de que una temporada (noviembre-enero) alcanzando -1.0 ºC o menos. Por lo tanto, en su apogeo, se favorece una La Niña de intensidad moderada. “En resumen, las condiciones de La Niña se han desarrollado y se espera que continúen con un 87% de probabilidad de La Niña entre diciembre de 2021 y febrero de 2022”, informan desde la NOAA (Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica).

Impactos de La Niña

“Durante un evento de La Niña, los cambios en las temperaturas del Océano Pacífico influyen en los patrones de lluvia tropical desde Indonesia hasta la costa oeste de América del Sur. Estos cambios afectan a los patrones climáticos en todo el mundo, y suelen ser más fuertes durante los meses de invierno cuando la corriente en chorro es más fuerte en los Estados Unidos”, comunican desde la NOAA.

En la cuenca del Atlántico, además, lo episodios de La Niña suelen coincidir con temporadas de huracanes más activas. En 2020, la temporada más frenética de todos los tiempos, incluso por delante de la de 2005 que batió récords, se documentaron 30 tormentas con nombre y 13 huracanes, seis de ellos de categoría 3 o superior, coincidiendo con un episodio de La Niña persistente.