Octubre ha empezado otoñal coincidiendo con lo que se conoce como el ‘cordonazo de San Francisco. Un frente trajo un cambio de tiempo el fin de semana precediendo al desplome de las temperaturas que ha causado nevadas y heladas en entornos montañosos. No obstante, a medida que se alejan las bajas presiones, España vivirá un breve ‘veroño’ con unos 30 grados o incluso más en algunas zonas.
Los chubascos son ya poco probables en la mayor parte de Cataluña y Baleares, que tuvieron un lunes muy lluvioso. En cambio, un nuevo frente se irá desplazando hacia el este atravesando buena parte del norte peninsular y causará precipitaciones en Galicia, área Cantábrica, norte del sistema Ibérico y Pirineos, sin descartar que, de forma débil y dispersa, también pueda afectar al sistema Central.
Las temperaturas empezarán a subir y la cota de nieve se situará progresivamente por encima de los 2.000 metros.
Tras el paso del frente, una dorsal anticiclónica ascenderá sobre la Península en los próximos días, por lo que la estabilidad irá ganando protagonismo. El miércoles todavía podrá llover en el Cantábrico oriental, en el este de Cataluña, Mallorca y Menorca, y podrán producirse rachas fuertes de viento en Ampurdán, el bajo Ebro y Menorca.
Las temperaturas seguirán subiendo en puntos de la mitad oeste y del interior, y se superarán ya los 32 grados en zonas del valle del Guadalquivir.
De cara al jueves, hablaremos de un ‘veroño’ con cielos completamente despejados en general (a excepción de alguna llovizna aislada en Cataluña y Baleares, y en el área del Estrecho), y los termómetros volverán a superar los 30 grados ya no solo en el entorno del Guadalquivir, también en las vegas del Guadiana.
De nuevo, el viernes será un día más veraniego que otoñal, con máximas hasta 10 grados más altas de lo habitual, aunque en la vertiente mediterránea, Estrecho y Baleares el viento de levante enfriará ligeramente el termómetro.
Según las predicciones provisionales del modelo europeo ECMWF, las altas presiones se reforzarán sobre las islas británicas, lo cual puede traducirse en un flujo húmedo y fresco de levante sobre el tercio este peninsular y las islas Baleares.
Todavía hay mucha incertidumbre, pero parece que una vaguada podría formarse cerca de la Península, propiciando un aumento de la inestabilidad en el Cantábrico oriental, Pirineos y todo el área mediterránea. Las temperaturas tenderán a descender ligera y gradualmente en casi todo el país en el inicio de la semana que viene.
En Canarias predominará un régimen de alisios moderados y habrá intervalos nubosos en el norte del archipiélago.