Un nuevo estudio lo demuestra: las cigüeñas dejan de volar a África y se quedan en España
La tendencia al alza de las temperaturas y el crecimiento de macrovertederos en España han modificado la migración de las cigüeñas
Son sobre todo las adultas las que eligen ahorrarse el viaje a África y permanecer en España
Como habrás notado, este invierno no ha destacado por ser especialmente frío. Nos hemos percatado nosotros, y también nuestro entorno. Los almendros ya lucen sus flores, los insectos campan a sus anchas y, según publica un año más la organización SEO/Birdlife, las cigüeñas ya no migran para invernar. Si por estas fechas solían, tradicionalmente, volar a España desde África, en las últimas décadas han aprendido que pueden ahorrarse este viaje porque aquí no se está tan mal durante la estación.
"Por San Blas la cigüeña verás, y si no la vieres: año de nieves". El refranero meteorológico no acostumbra a fallar. Nuestros abuelos repetían a comienzos de febrero esta frase y, efectivamente la tradición era que, si la cigüeña volvía en San Blas (3 de febrero) significaba que las temperaturas empezaban a templarse. Si por el contrario se dejaba ver más adelante, la experiencia les decía que al frío le quedaba todavía un poco.
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Este año la cigüeña blanca no recorrerá 2.500 kilómetros desde el Sahel, básicamente porque tampoco este año ha migrado al desierto. A la vista de los inviernos cada vez más llevaderos, prefiera ahorrarse el peligroso trayecto por el Estrecho de Gibraltar en el que muchos ejemplares mueren cuando el viento no juega en su favor.
Lo mismo ha ocurrido en Centroeuropa. Si antes cambiaban zonas frías del viejo continente por Tanzania o Senegal, ahora se dirigen al sur de España.
Los macrovertederos, su nueva fuente de alimentación
Otro motivo que lleva a la cigüeña a evitarse el viaje de España a África para después tener que regresar en la recta final del invierno, es que la búsqueda de alimento ya no es necesaria. Si antes su dieta se componía de langostas y saltamontes que encontraba en el desierto, ahora lo hace de la basura que se amontona en nuestros vertederos.
También las especies fáciles de capturar, informa el estudio de SEO/Birdlife, como el cangrejo rojo americano son de su agrado, ya que son tremendamente abundantes en los arrozales del sur de España. Podríamos concluir, por tanto, que las cigüeñas se han acomodado y son ahora más sedentarias.
Andalucía, su destino preferido
La investigación que ha seguido la migración de estas aves a lo largo de los años ha observado que su zona preferida de nuestro país en el invierno es el sur. Concretamente, Sevilla, Huelva y Cádiz, "así como el entorno de diversos vertederos de residuos sólidos urbanos (VRSU)", enuncia el texto de la organización ecologista.
Les gusta Doñana, aunque "las cigüeñas juveniles marcadas en España pasan su primer periodo invernal en África", con que hay diferencias en función de la edad de cada ejemplar. Cuanto más mayores, mejor conocen el difícil recorrido que implica llegar a África, y más frecuente es que se establezcan en la Península Ibérica en invierno. En cambio, los menos experimentados tienden a migrar.
Es decir, el gran cambio que SEO/Birdlife ha observado, calcula, desde la década de los 80, se da principalmente entre las cigüeñas adultas. Así, hemos pasado "de 7.594 aves en el censo nacional de 1995 a más de 31.229 en 2004", contabiliza.