La sombra fue nuestro mejor aliado en los meses de junio y julio, ambos los más calurosos a escala global desde que se tienen registros, y agosto parece haber alimentado la tendencia que ya había tomado el verano. Las altas temperaturas han sido una constante del mes, que cierra con un carácter 'cálido' o 'muy cáildo', tanto durante el día como durante la noche. En lo que respecta a las precipitaciones, podríamos decir que agosto ha sido normal, con numerosos episodios de lluvias torrenciales.

La temperatura media del mes ha sido 0,9ºC más alta del promedio del periodo 1981-2010, según ha informado la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Se sitúa así como el octavo agosto más caluroso del siglo XXI y el décimo desde 1965. En los últimos años, las comparaciones han evidenciado una tendencia clara: desde 2009, todos los agostos han dejado de media una temperatura superior a lo que era habitual para la época, y 2019 es el quinto año consecutivo en que se da esta circunstancia.

*Imagen: Anomalía de la temperatura en agosto de 2019 respecto al período 1981-2010 / Aemet

En puntos de Cataluña, Aragón y el cuadrante sudeste peninsular ha tenido un carácter extremadamente cálido, siendo así un agosto histórico en estas regiones. En zonas de la vertiente mediterránea como Murcia o Valencia se han superado los 42ºC en una ocasión y, en Asturias, la marca de los 33ºC del día 23 del mes marcó un récord de máxima.

Destacan también las noches tropicales (a más de 20ºC), en las que con dificultad hemos dormido. Más complicada aún fue la noche ecuatorial (a más de 25ºC) que tuvieron en Valencia el día 10, con 26,9ºC de madrugada, lo que ha supuesto un récord absoluto. Nunca desde que se tienen registros (1966) la provincia había registrado una mínima tan elevada.

Los 23 litros/m(2) que han caído de media en España durante el mes encajan con lo que se considera normal (según el periodo de referencia 1981-2010). No obstante, el carácter torrencial y tormentoso de las precipitaciones ha dejado multitud de incidentes especialmente en el centro y este de la Península, donde las inundaciones nos han acompañado en agosto.

*Imagen: Porcentaje de la precipitación acumulada con respecto al período 1981-2010 / Aemet

Durante los días 11 y 12 las nubes se cebaron en Cataluña, sobre todo en Barcelona. La siguiente semana el turno le tocó al tercio este peninsular, especialmente a Alicante. Más tarde llegó la DANA (depresión aislada en niveles altos o 'gota fría'), que hizo estragos en el centro, el litoral mediterráneo y Baleares. Por último, para despedirse, el mes descargó sus últimas lluvias en Cataluña los días 30 y 31. En más de cuarenta estaciones la Aemet registró precipitaciones de carácter torrencial.

El proyecto Copernicus, de la Agencia Espacial Europea, hizo público el jueves un documento en el que hace balance de cómo ha sido el mes a escala global. La temperatura media europea ha sido 1,1ºC más alta de lo normal para agosto (según el promedio del periodo 1981-2010). A nivel mundial, la temperatura ha superado en 0,53ºC la cifra habitual.

En Europa se ha tratado del cuarto agosto más caluroso desde 1979. En comparación con los datos que se recaban alrededor del planeta, el mes ha sido el segundo con las temperaturas más altas, después del de 2016.

*Imagen: Anomalía de la temperatura media a escala global en agosto de 2019 / Copernicus

La temperatura entre junio y agosto también supera el promedio del periodo 1981-2010 (lo que consideramos 'normal') en 1,1ºC. Destacan zonas de Europa, del oeste de Alaska, del norte de Canadá, norte de Groenlandia, centro-norte de Siberia, sur de África y una vasta extensión de la Antártida.

Ha sido el trimestre (junio-agosto) más caluroso desde al menos 1979 a escala mundial.