El fin de semana ha sido tempestuoso en las Islas Canarias. Las predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) apuntaban a posibles incendios, mucha reducción de la visibilidad por la irrupción de calima, y rachas de viento que podrían superar los 100 km/hora. Y así ha sido. Los bomberos no han descansado y muchos no han sido capaces de llegar a tiempo para las celebraciones de Carnavales por la cancelación de cientos de vuelos.
Según la nota que emitió el viernes la Aemet, está previsto que el polvo en suspensión no se disperse todavía. Los vientos del este que han arrastrado hasta el archipiélago canario diminutas partículas de arena del desierto del Sáhara empiezan a amainar ya, pero no lo suficiente.
Se prevé que a lo largo del lunes se retire el aviso por viento y, progresivamente, también por calima. No obstante, por lo menos hasta el miércoles la atmósfera seguirá impulsado el polvo hasta las Canarias, así como otras islas del Atlántico. Para entonces, no obstante, los niveles de concentración serán ya bastante más bajos, y tenderán a ir disminuyendo más a medida que pasen las horas, con que de cara al jueves podríamos hablar de una mejoría significativa.
Mientras que los focos activos en Tenerife ya han podido contenerse, en Gran Canaria, Lanzarote y Fuerteventura permanece el riesgo extremo de nuevos incendios forestales por las altísimas temperaturas, la baja humedad ambiental y el viento notable.
Se trata de una situación muy infrecuente en esta época del año. Las temperaturas superan en 10ºC el promedio habitual de estas fechas, y son hasta 15ºC más altas de lo normal en el interior de algunas islas, como Tenerife y Gran Canaria. Por la noche, se han batido cuatro récords de temperatura.
En el caso de la estación La Palma Aeropuerto, Tenerife Sur Aeropuerto y Gran Canaria Aeropuerto ha sido por temperatura mínima más alta, según datos de la Aemet: en ese orden, se han registrado de madrugada 20,9ºC, 23,9ºC y 22,3ºC. En Tenerife Sur Aeropuerto, además, el domingo hizo más calor que nunca antes en un mes de febrero, con 30ºC.
Una situación difícilmente contenible con rachas que han superado los 100 km/hora en al menos doce estaciones de Tenerife y Las Palmas, y con un porcentaje de humedad ambiental que el domingo no llegaba al 25% en buena parte de las islas por la llegada de calima que ha secado drásticamente el ambiente, como es el caso de La Aldea de San Nicolás, donde el fuego no ha dado tregua.