El calor de estos días se está dejando notar en las playas del Mediterráneo. La temperatura del agua del mar ha batido récords este verano, y sigue aumentando cada día. Entre las consecuencias más notables está la inusual cantidad de medusas que se están viendo en Valencia o Alicante.
El bochorno en las playas del Levante no da respiro por el día ni por la noche. En parte, esto se debe a una temperatura del mar que ha superado todos los registros anteriores. Es una auténtica barbaridad, incluso se habla de una ola de calor marina peor que la del verano pasado, que ya fue extrema.
La última semana de julio se habló en todos los medios de cómo el calor está afectando no solo en tierra, también en los mares que rodean nuestro país, incluso más lejos, en el Atlántico norte, donde la temperatura extremadamente alta lleva siendo noticia semanas.
El Mediterráneo registró una temperatura media de 28,71 ºC a finales del mes pasado, según el Instituto de Investigaciones Marinas del CSIC. Por su parte, la Agencia Oceánica de EEUU (NOAA) registró un promedio de 24,9 ºC en el Atlántico norte, algo histórico.
Esto es raro a mitad del verano. Generalmente, las temperaturas oceánicas más altas se registran al final de la estación, en septiembre, después de meses acumulando calor por la alta insolación.
Así, a mediados de julio la temperatura del Mediterráneo era unos 4 grados más altas de lo habitual, y recordemos que también marcó máximos históricos en los meses previos de junio, mayo y abril. En Baleares, incluso, se observó una ola de calor marina en enero de este año.