Este miércoles será el peor día de la ola de calor y probablemente el día más caluroso del 2023. Si puedes, evita salir a la calle en pleno ‘infierno ibérico’ porque las temperaturas van a alcanzar récords de hasta 45 grados y hay un puñado de provincias en alerta roja, el máximo nivel.
El lunes se alcanzaron los 44,8 ºC en la provincia de Badajoz, con 44,8 ºC. El martes, Mérida llegó a 43,7 ºC y Córdoba a 43,2 ºC. Son solo algunos ejemplos de cómo han sido los dos primeros días de la ola de calor, un aperitivo de lo que llega el miércoles, cuando los termómetros tocarán techo.
A primera hora de la mañana de este miércoles las temperaturas superaban los 27 ºC ya en muchas estaciones meteorológicas, y está previsto que, a medida que pasen las horas y el sol caliente, el termómetro se dispare de manera extraordinaria. Esta vez lo hará también por el norte, por lo que no podrán refugiarse quienes se encuentren en Asturias o el País Vasco de veraneo.
“En las horas centrales del día, las temperaturas serán muy altas, incluso en áreas de la meseta norte donde no es nada habitual se superarán los 40 ºC como el norte de Burgos, o el interior de Vizcaya y de Guipúzcoa”, ha informado el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Rubén del Campo.
En el centro peninsular, Madrid y Cuenca podrán llegar a 42 ºC, y en el este de Andalucía, Jaén y Granada podrán alcanzar o superar los 44 ºC.
Las zonas en alerta roja (riesgo extremo) por máximas de hasta 45 ºC son las siguientes: Córdoba, Granada y Jaén; la Comunidad de Madrid; la provincia de Burgos; Cuenca; Álava, Guipúzcoa y Vizcaya.
También habrá provincias en riesgo por tormentas: Almería, Granada, Teruel, Zaragoza, Burgos, Soria, Albacete, Cuenca, Guadalajara, Guipúzcoa y Vizcaya. En estas regiones, apenas se espera precipitación pero sí se formarán fuertes rachas de viento por la tarde, disparando el riesgo de incendios.
En Guipúzcoa y Vizcaya, además, la Aemet alerta del riesgo por galernas, que podrán causar “un cambio brusco en la dirección del viento, rachas muy intensas y un descenso brusco y súbito de las temperaturas”, señala Del Campo. “Mucha precaución sobre todo cerca del mar”, advierte.
Además, la llegada de polvo sahariano causará calima en el sur de la Península, extendiéndose hacia el norte, así como en Canarias. Esto empeorará la calidad del aire.
El jueves bajarán las temperaturas de forma acusada en el Cantábrico, donde el descenso será extraordinario, en cambio subirán hasta 10 o 12 ºC de golpe en el área mediterránea, ya que los vientos del noroeste llegarán recalentados y secos a esa zona.
“Seguirá siendo una jornada muy calurosa en general en toda España, con entre 38 y 40 ºC en buena parte de la zona centro, sur y este peninsular, y en el valle del Guadalquivir se rondarán los 42 a 44 ºC, al igual que en el interior de la comunidad Valenciana y la Región de Murcia”, dice el meteorólogo.
El viernes apenas bajarán las temperaturas en España, salvo en el área mediterránea, donde sí lo harán. Pero aún hará de 38 a 40 ºC en la zona centro, depresión del Ebro y mitad sur. Incluso en el valle del Guadalquivir se podrá llegar de nuevo a 44 ºC, “sin descartar que se pueda superar esa cifra”, dice el portavoz de la Aemet.
Ya el fin de semana, las temperaturas bajarán algo más, sobre todo el domingo, cuando superaremos los 35 ºC en buena parte de España, pero será más complicado ya que lleguemos a 40 ºC.
En Canarias, en cambio, el calor de verdad llegará desde el jueves (con calima que resecará el ambiente), y persistirá seguramente hasta los primeros días de la próxima semana.