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Agosto empieza este martes con un nuevo repunte del calor. Pero durará poco. Por primera vez desde que arrancó el verano, vamos a tener un respiro de las altas temperaturas por la llegada de una borrasca atlántica con aire polar que va a desplomar los termómetros. Las máximas serán otoñales, hasta 10 grados más bajas de lo normal para estas fechas.
Este martes y miércoles serán días muy calurosos. Tocará protegerse del sol por la sombra porque los termómetros podrían alcanzar los 38 ºC en ciudades del centro como Madrid y Toledo, y serán más altas en Zaragoza, Valencia o las provincias del valle del Guadalquivir. En Murcia, se rozarán los 43 ºC.
Las noches serán tórridas en las ciudades mediterráneas como Barcelona, lo cual quiere decir que hará 25 ºC de mínima o más. Y tampoco resultará fácil dormir en el resto del país, con entre 15 y 23 ºC de madrugada.
A partir del jueves las temperaturas caerán en picado en algunos puntos del país. Hará hasta 10 grados menos que el día anterior, tras un descenso “extraordinario”, ha informado el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Rubén del Campo.
Este descenso térmico supondrá un alivio tras el julio más caluroso de la historia no solo en España, sino a nivel global, como ha anunciado ya la Organización Meteorológica Mundial, con el sur de Europa como uno de los puntos calientes del mapa.
Una borrasca atlántica barrerá el norte de la Península, “dejando precipitaciones en Galicia, comunidades cantábricas y Pirineos”, y tras ella entrará viento del norte y noroeste que arrastrará aire más frío hacia nuestro país.
“Así, habrá una bajada generalizada de las temperaturas que será notable en la mitad norte, especialmente en las diurnas”, señala el experto de la Aemet.
Aunque también lo notaremos por la noche. En el norte de Madrid, en Valladolid o Galicia dormiremos con unos 8 ºC, y en Ávila podría hacer tan solo 5 ºC de noche en algunos pueblos. Únicamente seguirá el calor nocturno en puntos del sur y del área mediterránea, así como Canarias.
El viernes las temperaturas volverán a bajar. “Será una jornada inusualmente fría para esta época del año en la mitad norte, con máximas entre 5 y 10 ºC más bajas de lo normal, y numerosos puntos donde no se alcanzarían los 25 ºC de máxima”, dice Del Campo.
“Ciudades como Pamplona o Vitoria rondarán los 20 o 22 ºC de máxima", unas temperaturas más propias de otoño que de plena canícula, que es la época más calurosa del año, de acuerdo con los registros.
Además, el viernes podría haber chubascos localmente intensos que ocasionalmente afectarán al tercio este y Baleares.
“El episodio de tiempo más fresco será breve, durará de 2 a 3 días como mucho. El sábado volverán a subir las temperaturas y se impondrá de nuevo el calor intenso a la mayor parte de España”, concluye.