Los últimos días han sido trágicos en gran parte de China y Filipinas. El tifón 'Doksuri' ha dejado a muchas regiones totalmente aisladas por las inundaciones, y más de un millón de personas han tenido que ser rescatadas de sus hogares, incluidos cientos de niños. Hay además varios muertos.
Y en China cerca de 900.000 personas se han visto afectadas por el tifón Doksuri, que irrumpió el viernes en el suroeste del país. Las intensas lluvias han afectado a otras zonas del centro y el norte del país, incluidos suburbios de la capital, Pekín. Las maniobras de rescate no han sido nada fáciles.
El tifón 'Doksuri', el quinto de este año, llegó a la costa de la ciudad de Jinjiang sobre las 09.55 horas (hora local) del viernes. Desde entonces, los fuertes vientos y lluvias han dañado más de 6.333 hectáreas de tierras de cultivo en Fujian.
Asimismo, 44 casas se han derrumbado y otras 178 viviendas han sufrido graves daños, con pérdidas económicas directas valoradas en alrededor de 59,99 millones de dólares (unos 54,38 millones de euros).
La estación meteorológica de la provincia ha advertido de que las lluvias intensas persistirán en Fujian y ha emitido avisos sobre posibles desastres secundarios, como deslizamientos de tierra e inundaciones en áreas urbanas y rurales en ciudades costeras y algunas regiones del norte, entre ellas Putian, Fuzhou, Quanzhou y Ningde.
El número de muertos por inundaciones y deslizamientos de tierra provocados por el tifón Doksuri en Filipinas será de al menos 25 víctimas, según publica este lunes Xinhua, y aún hay 20 personas desaparecidas.
Los últimos datos del Consejo Nacional de Gestión y Reducción del Riesgo de Desastres (NDRRMC) elevan a más de un millón los afectados en todo el país.
En cuanto a la agricultura, la tormenta ha afectado a más de 105.000 agricultores y pescadores, con daños a las cosechas y la infraestructura agrícola de al menos 1.500 millones de pesos (unos 25 millones de euros). Además, hay daños en la infraestructura por 4.300 millones de pesos (71 millones de euros).
'Doksuri' tocó en Filipinas antes de hacerlo en China. Lo hizo el miércoles por la mañana en varias islas del extremo norte del país.
Una nueva tormenta denominada 'Khanun' amenaza ahora las mismas regiones afectadas por Doksuri con intensas lluvias y posibles inundaciones, por lo que las autoridades se están preparando para atender nuevas emergencias.