España va a pasar del frío helador a los aguaceros este fin de semana. La llegada de un tren de borrascas causará un cambio de tiempo que se mantendrá durante toda la semana del Puente de Diciembre y posiblemente las semanas siguientes. En algunas zonas podrán acumularse cerca de 200 litros/m2.
“La semana del 5 al 11 estará caracterizada por el paso de borrascas y frentes atlánticos, con abundantes precipitaciones”, ha comunicado la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), así como la posibilidad de nevadas en zonas muy bajas. Aún hay mucha incertidumbre en el pronóstico.
Las lluvias más abundantes esta semana se prevén en la mitad occidental peninsular, más importantes en el oeste de Galicia, de Andalucía y del Sistema Central.
El lunes podrán ser localmente fuertes en el litoral atlántico andaluz.
El martes, probablemente una borrasca atlántica se acercará a la Península y las lluvias se irán extendiendo por prácticamente todo el país, de oeste a este, aunque serán menos probables en el sureste peninsular y en las islas Baleares.
De forma más débil y dispersa, también se darán en el interior de la mitad oriental, siendo menos probables en Baleares y en el litoral mediterráneo, especialmente en el del sureste.
Las precipitaciones serán en forma de nieve en cotas relativamente altas en zonas de montaña, bajando significativamente la cota a partir del miércoles en la mitad norte, si se cumple el pronóstico. Esto traería nevadas a zonas llanas de la mitad norte y el centro peninsular, no solo a zonas de montaña, aunque está por confirmar, ha dicho la Aemet.
Las lluvias también afectarán a Canarias, siendo más probables en el norte de las islas de mayor relieve a lo largo de toda la semana.
El lunes serán generalizadas en todo el archipiélago, siendo más débiles en las islas más orientales. A partir del martes, cuando la borrasca que afectará al archipiélago se alejará hacia la Península, las lluvias perderán fuerza.
Las temperaturas ascenderán el lunes y el martes, y descenderán a partir del miércoles. Las heladas irán perdiendo fuerza y extensión hasta el martes, quedando restringidas a zonas montañosas del norte peninsular. A partir del viernes volverán a extenderse por la mitad norte peninsular.
En el conjunto de la semana, eso sí, las temperaturas serán más altas de lo habitual en gran parte de España para estas fechas por la influencia de los vientos ábregos procedentes del suroeste, húmedos y cálidos.
Los vientos serán de componente norte y este, y rolarán a partir del martes a componente oeste, pudiendo soplar fuertes, en Baleares y Canarias, en áreas montañosas y de litoral en la Península y, ocasionalmente, en áreas llanas de la vertiente atlántica.
A partir del viernes tenderán a soplar del suroeste. Se intensificarán a partir del jueves y, sobre todo, el fin de semana, cuando probablemente habrá rachas muy fuertes.