El Mar Cantábrico se parece mucho al Mediterráneo este verano. Las altas temperaturas recientes han calentado el agua hasta tal punto que los vecinos lo califican de “caldo”, acostumbrados al fresquito habitual del océano en el norte.
La Concha suele ser una playa para valientes, y sin embargo estos días sus aguas han alcanzado los 25 grados, una temperatura más propia del Mediterráneo, y que supera en unos 5 ºC el promedio del verano para el País Vasco.
Los expertos explican que se debe a un “estancamiento” del agua en el Golfo de Vizcaya, que tiene muy poco movimiento, lo cual hace que la radiación solar caliente mucho la superficie del agua y esta se quede cerquita de la costa vasca.
El récord de temperatura se registró hace 20 años, con 26,5 grados. Antes de los años 80, las aguas del Cantábrico jamás superaban los 23 grados. Actualmente, vivimos algunos de los días más cálidos de los últimos 50 años en cuanto a temperaturas del agua del mar.
En el Mediterráneo, basta un chapuzón para darse cuenta de lo extraordinariamente caliente que está su superficie este verano también. El pasado 9 de agosto se registró en la boya de Valencia perteneciente a Puertos del Estado un récord de temperatura próximo a los 30 grados.