Asistencia escolar: ¿Cuántas faltas puede tener un niño en Primaria?

Faltar a la escuela puede tener graves consecuencias para los pequeños, pero también para los padres o tutores legales, porque si el alumno comienza a faltar por causas no justificadas, se pondrá en marcha el protocolo correspondiente, que podría traer graves consecuencias para todos, porque en los casos más graves podría llegar a costarle a los padres la patria potestad del niño

El absentismo escolar está considerado un problema grave al que conviene prestar atención desde el principio, para poder prevenirlo, evitando así que pueda tener consecuencias irreparables para el niño. Se considera absentismo escolar la falta de asistencia del alumno, sin causa justificada y durante la edad de escolarización obligatoria, todo un problema porque puede retrasar el aprendizaje del niño, pero también abocarle al fracaso escolar y abandono de la enseñanza, con todo lo que ello conlleva. 

Asistencia escolar: ¿Cuántas faltas puede tener un niño en Primaria?

Existen dos tipos de faltas, las justificadas y las que están sin justificar. Son injustificadas aquellas que no son autorizadas por los padres o tutores del menor a través de un escrito o un aviso previo a través de los cauces establecidos para tal fin, se consideran justificadas aquellas en las que sí existe la autorización de los padres. 

No todas las faltas pueden ser justificadas, incluso si las conocen los padres, existen determinados supuestos que son considerados como tal, pero otros no. Por ejemplo, se pueden justificar las faltas de asistencia por pruebas médicas, o por asistencia a obligaciones ciudadanas donde se requiera la presencia del menor, también se considera falta justificada la hospitalización o enfermedad. 

El ausentismo escolar es algo que preocupa y por eso existen y se ponen en marcha diferentes protocolos una vez que se ha identificado, pero también antes. La prevención es una de las muchas herramientas que se tiene para evitar llegar a determinados límites. Los tutores son los que se encargan de controlar las ausencias de los alumnos y contactar con los padres en caso de que sea necesario, así como de comenzar el protocolo de ausentismo avisando a la jefatura de estudios. En caso de ser necesario, se seguiría adelante dando aviso a las autoridades correspondientes. 

Cada caso es un mundo y habitualmente eso los docentes lo saben y actúan en consecuencia, tampoco todas las situaciones son iguales y existen casos leves o graves. Se considera absentismo leve cuando un alumno tiene entre un 15 y un 25% de faltas sin justificar al mes, será grave si es igual o superior al 50%. En los primeros casos se suele actuar a nivel interno, activando las alarmas del centro; en los casos más graves se suele poner en conocimiento de las autoridades. 

Además de la norma general, los centros suelen tener sus propios protocolos, sobre todo a nivel interno. Igual que establecen sistemas propios para justificar las faltas, ya sea a través de una plataforma para ello o esperando un email o llamada de los padres que les avise previamente, también puede haber diferencias en la cantidad de faltas injustificadas al año que se pueden aceptar de un alumno. Si la ausencia es de uno a tres días consecutivos, el justificante es imprescindible.