Las ventajas de estudiar en una institución extranjera

Cada vez más estudiantes españoles optan por estudiar en el extranjero debido a las ventajas personales, académicas y profesionales que les aporta. Vivimos en un mundo cada vez más globalizado, donde la competencia laboral es internacional, y por esto, las empresas buscan cada vez más perfiles multiculturales.

Formarse en otro país, además de aprender con fluidez inglés, aporta a los alumnos un conjunto de herramientas de gran valor que no solo benefician a su educación sino que también van a hacer que tengan un perfil tanto personal como profesional más preparado. Esto se ha convertido en una alternativa muy atractiva para los estudiantes que, en muchos casos, es necesaria para sobresalir en el competitivo mercado laboral.

Enriquecimiento cultural y desarrollo personal

Este es uno de los beneficios más evidentes: la inmersión cultural. Cuando un estudiante cambia de país, no solo cambian sus estudios, también lo hace su vida cotidiana. Por lo que ha de adaptarse a nuevas costumbres o estilos de vida distintos. Gracias a esta inmersión cultural, los estudiantes consiguen desarrollar una visión más amplia del mundo.

Al vivir en el extranjero, lo que más va a cambiar del estudiante es su vida personal, ya que se tienen que enfrentar a situaciones desconocidas en un país extranjero y esto les impulsa a tener una mayor autonomía y confianza en sí mismos. También, se fortalece la resiliencia, ya que al estar lejos de su círculo cercano, tienen que hacer frente solos a cualquier problema o dificultad que les llegue y además, han de aprender a tomar decisiones. Por otro lado, a los estudiantes que viven en otras ciudades o países se les da un impulso de madurez notable, ya que deben gestionar todos los ámbitos de su vida como las finanzas, búsqueda de alojamiento y también la organización de su tiempo.

Mejora en los idiomas

Otro de los beneficios más palpables es la mejora de las habilidades lingüísticas, ya que no solo va a practicar ese idioma en el centro educativo, sino que tiene que hacer uso de él en su día a día en tareas mundanas.

El conocimiento de otras lenguas se ha convertido en un activo indispensable para la empleabilidad, pero no sólo dominar el inglés, que en muchas empresas se da por hecho, sino que si consigue un nivel alto en idiomas como alemán, francés o chino, se tiene una ventaja considerable frente a otros perfiles a la hora de conseguir un empleo.

Acceso a programas y metodologías pedagógicas diferentes

Al estudiar en una institución extranjera, el alumno tiene acceso a una variedad de programas educativos y metodologías que son diferentes a las que se pueden ver en nuestro país, y en algunos casos, incluso superiores. Cuando hablamos de universidades, en países como Estados Unidos o Reino Unido, se encuentran las más prestigiosas del mundo y son conocidas por sus planes de estudio innovadores, por sus investigaciones de vanguardia y su enfoque en un aprendizaje más experimental.

Además, estas instituciones poseen recursos tecnológicos avanzados y también, laboratorios altamente equipados. En países como Estados Unidos y Canadá, el sistema educativo promueve una mayor flexibilidad en los estudios, permitiendo que los estudiantes puedan explorar distintas áreas antes de decidir por cuál decantarse para su especialización. Para los estudiantes que llegan desde España, es una oportunidad de poder ampliar sus horizontes y explorar áreas que en nuestro país no están tan desarrolladas.

Red de contactos internacional

Estudiar en una institución extranjera permite a los estudiantes crear una red de contactos a nivel internacional tanto de compañeros, como de profesores y profesionales de diferentes nacionalidades. Esta red es muy útil a la hora de buscar futuras oportunidades laborales, ya que pueden abrir muchas puertas en otros países.

Pero crear una red de contactos internacional no es importante sólo a nivel profesional, sino que también ayuda a desarrollar habilidades interpersonales y el trabajo en equipo.

Mayor empleabilidad y ventajas competitivas

Las empresas suelen valorar mucho a los candidatos que han cursado estudios en el extranjero, ya que este tipo de experiencia denota iniciativa, independencia y capacidad de adaptación. También, hay que tener en cuenta que la experiencia internacional es algo esencial para aquellas empresas que operan en mercados globales.

La globalización ha hecho que la competencia en el mercado laboral sea mucho más intensa, y que contar con una experiencia internacional es esencial para diferenciarse de otros candidatos. En España, hay distintos sectores como son el comercio internacional, la tecnología o el turismo donde valoran muy positivamente a los solicitantes que se han formado en el extranjero.

Más oportunidades de becas de estudios

Muchos países ofrecen becas para atraer a estudiantes internacionales, lo que facilita considerablemente el acceso a la educación en otros países. Alemania, Francia o los países nórdicos tienen programas educativos con tasas de matrícula muy accesibles. Por otro lado, existen becas internacionales de intercambio estudiantil como las conocidas Erasmus, que durante un año, un alumno puede estudiar en un país extranjero.

Para muchos estudiantes españoles, este apoyo económico representa una oportunidad de acceder a programas académicos de prestigio en otras universidades.