Los precios de la vivienda expulsan a las familias españolas al extrarradio de las grandes ciudades y más allá

Cada vez más familias tienen que abandonar las ciudades españolas ante el encarecimiento de la vivienda. Con el aumento de sus miembros se hace casi imposible pagar más espacio, nos cuenta un matrimonio con hijos, en Málaga, pero es lo que está ocurriendo a cientos de personas que han tenido que mudarse a 20 kilómetros y hasta 100 para encontrar un techo que puedan pagar.

"En Málaga es imposible comprar algo con tres habitaciones con un patio", por un precio razonable. "Ni se acerca", dice esta familia que han tenido que comprar en Cártama, a 20 kilómetros de la capital. Tiran la toalla y se han despedido de su ciudad: "No creo que podamos volver a vivir en Málaga, admiten.

Esta realidad no es únicamente una situación en la ciudad andaluza, sino que se repite y expande como una mancha de aceite. Los precios suben en las ciudades y obliga a los vecinos a salir con la maleta hacia los pueblos o ciudades del extrarradio.

En Barcelona, la situación es similar, aunque allí las familia tienen que alejarse todavía más: los destinos son Torredembarra, en Tarragona a casi 100 kilómetros es el destino. Está a dos horas de los centros de trabajos, empresas, pero es lo más accesible para muchos, que también han dejado Barcelona, por sus altos precios a causa de la gentrificación.

"A dos horitas y aún así me sale más a cuenta que estar pagando un alquiler en Barcelona, dice una mujer que busca desde hace semanas un piso dónde vivir que pueda pagar.

La subida del precio de la vivienda y del alquiler es un problema común en todas las comunidades . "Cada semana que pasa se incrementa un poco más".

En A Coruña, Galicia, una familia nos cuenta su búsqueda de vivienda, pero no hay nada accesible en el centro, ni en la periferia. Un piso en Cambres a 15 kilómetros tampoco es muy razonable y se escapa del presupuesto.

"El problema que se está extendiendo es que en la ciudad no hay oferta", exclama uno de los afectados. Ellos han pasado de vivir en Vigo a intentarlo en Poio, a 30 kilómetros diarios.

Nos cuentan que no buscan en el centro, sino en los alrededores, pero lo que encuentran es desalentador: "Es más caro que hace tres meses, que estaba a 900 euros y ahora en 1200", nos cuentan. Tendrán que seguir buscando.

Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail.

Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.