Los mayores podrán volver a viajar en octubre a través de los programas del IMSERSO. Lo ha anunciado la ministra de Derechos Sociales Ione Belarra, que lo ha vinculado al ritmo de vacunación y a las circunstancias sanitarias.
La campaña de los viajes de mayores dependerá de los criterios de las autoridades sanitarias y otros múltiples factores entre los que se encuentran: el fin del estado de alarma, el desarrollo del programa de vacunación frente a la COVID-19, la comprobación del mantenimiento de la inmunidad en el tiempo y la evolución general de la incidencia acumulada por zonas o las eventuales cancelaciones impuestas por las limitaciones a la movilidad si estas se produjeran.
"Estamos trabajando ya en la puesta en marcha de los procesos administrativos para que, una vez que las autoridades sanitarias lo consideren pertinente, puedan reiniciarse ambos programas: el de turismo social y el de termalismo. Si el proceso de vacunación continúa a buen ritmo, y nada hace pensar lo contrario, la próxima temporada de los viajes del IMSERSO comenzará con normalidad como cada año", ha explicado la ministra Belarra, este miércoles, en la Comisión de Derechos Sociales y Políticas Integrales de la Discapacidad del Congreso.
Unos 900.000 mayores se beneficiaban cada año de los programas de Turismo Social y de Termalismo organizados por el IMSERSO antes de la pandemia. Las restricciones por el covid obligo al Gobierno ha suspenderlos en marzo de 2020.
La ministra reconoció las dificultades para las personas mayores durante este periodo y del esfuerzo que realizaron para cumplir con el confinamiento y frenar la expansión del coronavirus.
"Somos conscientes de que las personas mayores han hecho un enorme esfuerzo este año por cuidarse, quedándose en casa, respetando las restricciones, dejando de ver a vuestros hijos, hijas, nietos y nietas. Las personas mayores se merecen poder salir, viajar y descansar de este año difícil cuanto antes", ha subrayado Belarra.
La ministra de Derechos Sociales ha subrayado "la importancia económica que tiene esta actividad para el mantenimiento de muchos puestos de trabajo en el sector turístico", pero igual de importante es mantener "el principio que ha regido hasta ahora todas las decisiones: el de proteger la vida de las personas por encima de todo".
En ese sentido, Belarra ha asegurado que ya desde hace meses se están realizando diversos trabajos administrativos preparatorios, como son la elaboración de la oferta de plazas o la redacción de los pliegos de contratación de las operadoras para el caso del programa de Turismo Social y de los contratos con los establecimientos Termales.
En diciembre de 2020 se mantuvieron reuniones y se recogieron las aportaciones de las propias personas mayores, a través de colectivos representativos, con el objetivo de recibir sus demandas y opiniones respecto a los programas de turismo y termalismo.