El salario medio del conjunto de España continúa la tendencia al alza que inició en la segunda mitad de 2017. Alcanzando los 1.695 euros mensuales. Este incremento interanual, se coloca en el 2,2%, siendo el décimo consecutivo. Además, es el mayor incremento del salario medio desde marzo de 2010.
Según Adecco Group Institute, el centro de estudios y divulgación del Grupo Adecco, que ha realizado un informe teniendo en cuenta cinco áreas fundamentales en el entorno laboral de las personas como son la remuneración, la seguridad laboral, las oportunidades de empleo y desarrollo profesional, la conciliación entre la vida personal y la profesional y la conflictividad laboral. En total, se analizan 16 subvariables diferentes.
Como consecuencia de ese incremento, los mencionados 1.695 euros suponen un nuevo máximo histórico. Nunca el salario medio ha sido tan alto, en términos nominales, como ahora. Lo mismo ocurre en 13 autonomías: todas menos Andalucía, Castilla-La Mancha, Extremadura y Murcia.
Considerando las variaciones acumuladas en los últimos ocho trimestres pueden verse que el salario medio del conjunto de España gana en la actualidad un 1%. Un año atrás, en cambio, perdía un 2,2%.
El caso general, que comprende a 11 regiones, es el de aquellas que hace un año mostraban un deterioro en el poder de compra del salario promedio y ahora presentan un aumento en el mismo. Dentro de este grupo de autonomías, las mayores subidas ocurren en Galicia (+2,9%, el mayor incremento a nivel autonómico), Cataluña (+2,2%) y Canarias (+2,1%).
La tendencia al alza de la siniestralidad laboral continúa en marcha. En el cuarto trimestre del año pasado se han registrado 70,2 accidentes que han causado baja cada 10.000 ocupados (+4,4% interanual). Por un lado, es la mayor proporción de accidentes desde junio de 2011.
Por otro, el incremento interanual es el más alto en tres años, lo que indica que el movimiento ascendente no se ha debilitado. La proporción de accidentes de trabajo se ha incrementado en 15 autonomías.
Los mayores incrementos se observan en Navarra (+19,1% interanual), País Vasco (+14,2%) y La Rioja (+13,9%). Las únicas regiones que muestran un descenso son Madrid (-2% interanual) y Canarias (-6,1%).
En la segunda mitad del año pasado, por primera vez en nueve años, el número de parados de larga duración (llevan al menos dos años buscando empleo) ha sido inferior al millón de personas.
El número de perceptores de la prestación por desempleo ha crecido en los tres últimos trimestres del año pasado. Al final de 2019 cobraban esa prestación en toda España 1,9 millones de personas, 123.000 más que un año antes.
En el trimestre analizado, se han contabilizado 954.000 desocupados de larga duración (135.200 menos que un año antes), que es la menor cantidad desde diciembre de 2010. Sin embargo, es una cifra que multiplica por más de 4 a los 223.800 parados de larga duración que había al final de 2007.
Como proporción del total de personas sin empleo, considerando la media de los últimos cuatro trimestres, los parados de larga duración equivalen al 30,5%. Es una proporción 4,4 puntos porcentuales inferior a la de un año antes y la menor desde 2012.