Entre la batería de medidas anunciadas por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para hacer frente a la crisis económica derivada de la guerra de Ucrania, hay una rebaja fiscal en la factura de la luz, que contempla la bajada del IVA para quienes tengan un contrato en el mercado regulado. Entonces, ¿quién se queda fuera de la rebaja de la luz y a quién beneficia?
La escalada del precio de la luz no es nueva. Ya el año pasado el Ejecutivo aprobó una rebaja fiscal temporal en la factura de la luz que ahora, con la guerra de Ucrania, ha alargado hasta el 30 de junio. No obstante, esa rebaja en el IVA solo afecta a quienes tenga la tarifa regulada, es decir, en la que se paga por la electricidad consumida según el precio de la energía que resulta del mercado, más impuestos y peajes.
Solo el 10% de los pequeños consumidores de electricidad están acogidos a esta tarifa, según datos de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) recogidos por El Economista. En España hay 30 millones de pequeños consumidores de luz, solo 10 de ellos tienen la llamada tarifa regulada o precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC). El resto, 20 millones pertenece al mercado libre, al que se han sumado en 2021 más de 1,25 millones de usuarios, en parte por las ofertas lanzadas por la comercializadoras.
Los pequeños consumidores que tengan un contrato de luz de tarifa regulada –no de mercado libre- mantendrán la actual rebaja del 10% del IVA, la bajada del impuesto a la electricidad al 0,5% -el tope que permite Bruselas- y la suspensión de impuesto a la generación eléctrica.
Todo ello, se mantendrá hasta el 30 de junio, dentro del paquete de medidas anunciado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para afrontar la crisis económica derivada de la guerra de Ucrania, que está afectado especialmente a los precios de las materias primas, como el gas y la electricidad, además de a los alimentos básicos.
La rebaja fiscal dela factura de la luz no es la única medida aprobada por el Ejecutivo del PSOE y Unidas Podemos. Tabién han previsto mantener el bono social eléctrico hasta junio con la intención de llegar a 600.000 familias más y alcanzar casi dos millones de beneficiarios.
Estos consumidores también deben pertenecer al mercado regulado de la luz, no tener contratados más de 10 KW y cumplir una serie de requisitos económicos que varían en función de la renta y la situación familiar.
Se puede pedir por teléfono, correo electrónico, correo ordinario o fax, en cualquiera de las empresas comercializadoras, que tienen la obligación de ofrecer y financiar el bono social. El descuento en la factura para las familias vulnerables oscila entre el 60 y el 70%.