Es una especie de Indiana Jones de la innovación. Se dedica a encontrar tesoros ocultos en productos, servicios y empresas innovadoras, sacarlos a la luz y apoyarlos para hacer que triunfen y generen riqueza para Europa. Se llama Mikel Lasa y es el director en Iberia de EiT Innoenergy, una especie de lanzadera de empresas pero a nivel público del Gobierno europeo. La energía sostenible, las baterías y el hidrógeno verde son los ámbitos en los que EiT Innoenergy aplica “aceleración e inversión” para, con una mano, acelerar la transición energética. Con la otra se dedica a impulsar la formación en estos temas “las personas son clave y es necesaria gente formada y con conocimientos”.

Pregunta: Esto de EiT Innoenergy en España nos suena un poco raro...

Respuesta: Nuestra misión es acelerar la transición energética a través de la innovación y el emprendimiento. Para cumplirla hacemos dos cosas. La primera, todo lo que es aceleración e inversión en el sector de la energía sostenible tanto en empresas emergentes como en proyectos industriales consolidados. Eso, siempre que estén relacionados con unas cadenas de valor estratégicas a nivel europeo que son las baterías, la energía solar fotovoltaica y el hidrógeno verde. Dentro del ámbito de la energía sostenible, también “tocamos” otras temáticas como la generación por energías renovables, eficiencia energética, redes eléctricas, economía circular para la energía... La segunda es la educación porque entendemos que para cumplir esa misión de acelerar la transición energética las personas son clave y es necesaria gente formada y con conocimientos en tecnología y negocio en estos ámbitos.

P: ¿Un ejemplo concreto?

R: Estamos incidiendo mucho en el mundo de las baterías porque van a ser necesarios en Europa unos 800.000 profesionales en nuevos empleos en este ámbito que requerirán este tipo de formación.

P: ¿Cómo desarrollan esa educación?

R: Con unos programas máster que implantamos hace ya unos 10 años a nivel europeo y con unos programas de formación para profesionales. Nosotros hemos desarrollado junto con la industria europea unos contenidos formativos que se van a desplegar a través de una serie de centros de formación con los que estamos llegando a acuerdos para que impartan los cursos. Nosotros proveemos los contenidos, los materiales, formamos a sus formadores y prestamos otros servicios, pero esos centros son los que impartirán los cursos con su infraestructura y capilaridad. También hemos firmado un acuerdo con la Escuela de Organización Industrial (EOI), que será otro de los canales, posiblemente el primero, que ya está preparando un concurso público para impartir las primeras formaciones.

P: ¿Qué presupuesto tienen para desarrollar todos estos objetivos?

R: A nivel Europeo viene a ser de unos 90 millones de euros de promedio. Y en España oscila entre 10 y 15 millones de euros anuales dependiendo de los programas que se estén llevando a cabo.

P: ¿Cómo seleccionan los proyectos que apoyan? ¿Cómo llegan hasta las ideas y las empresas?

R: Ahora hay mucha gente que contacta con nosotros porque empezamos ya a tener un cierto nombre. Hasta ahora habíamos funcionado publicando convocatorias de proyectos y recibiendo propuestas. Ahora por nuestro conocimiento del ecosistema tras casi 12 años de trabajo, ya sabemos un poco dónde se originan los proyectos. También llegamos a muchos de ellos a través de nuestros socios. Luego si vemos que hay encaje y más allá de una pequeña inyección financiera inicial, donde nosotros aportamos valor es en nuestra capacidad para ayudarles a acelerar sus proyectos y crecer.

P: ¿Cómo ve ubicada a España en cuanto a innovación en Europa? ¿En qué nos deberíamos de focalizar como país?

R: A nivel de innovación, de capacitación de las personas creo que no tenemos nada que envidiar a Europa en el sector de la energía ni de la movilidad. Tenemos grandes profesionales y grandes empresas y viendo otros proyectos en el continente, repito que no tenemos nada que envidiar. Nos falta un poco más de cultura empresarial colaborativa, de sistema, de inversores, si nos comparamos con otros sitios como Escandinavia donde es increíble la red que tienen en torno a la industria y los mecanismos que tienen para apoyarla. Pero creo que estamos en una posición muy buena y creo que en esto de la transición energética en España tiene una oportunidad industrial histórica única. Hasta ahora la economía se ha movido a través del petróleo pero a partir de ahora lo que va a marcar las diferencias van a ser las energías renovables y el tener acceso a energía limpia y barata va a ser una ventaja a nivel industrial tremenda. Estamos empezando a ver que muchísimos proyectos para la generación de hidrógeno verde (para muchos procesos industriales, movilidad a larga distancia, etc.) están empezando a venir a España porque tenemos unas condiciones envidiables tanto de radiación solar como disponibilidad de energía eólica etc. Y también unos de los mejores costes de producción junto a Suecia y Noruega que tienen mucha hidráulica. Son posiblemente los costes de producción más competitivos dentro de Europa y es una gran oportunidad para atraer industrias a España y reindustrializar nuestro país gracias a la energía abundante y barata.

P: ¿Es el hidrógeno verde una oportunidad tan seria?

R: Ahora mismo tenemos hiperactividad, muchísimos proyectos. Algunos con más sentido que otros, pero va a ser un vector de crecimiento industrial para España muy importante. Pero la energía no sólo es buena para este vector, sino que también es uno de los condicionantes importantes para instalar las gigafactorías de baterías es el acceso a electricidad sostenida, abundante, barata y limpia. Son procesos que requieren de mucha energía. Item más, si la tendencia es la de descarbonizar la industria y para eso hace falta energía sostenible...

P: Parece que Volkswagen podría instalar una de esas gigafactorías de baterías

R: Existen diversas iniciativas en Valencia, en Extremadura, País Vasco... Tenemos una actividad muy relevante. Pero además de los proyectos de empresas españolas, entiendo que deben llegar inversiones de grandes empresas extranjeras. Supongo que acabarán instalándose aquí porque somos el segundo país fabricante de automóviles de Europa, la electrificación del sector es imparable. Y como nuestras fábricas seguirán fabricando vehículos y serán eléctricos, tendrá todo el sentido que también se fabriquen aquí muchas de las baterías que necesiten.

P: Esas factorías necesitarán materiales. ¿Qué opinan de las paralizaciones de extracciones de minerales necesarios en España?

R: En Europa, y en España también, a veces hay una mezcla de desconocimiento e hipocresía. Todos queremos vivir en un estado de bienestar y utilizar cosas. Pero para la fabricación de cualquier producto es necesario extraer materias primas: minerales, metales, madera... En Europa tenemos una posición algo hipócrita porque parece que nos creemos que esos productos salen del aire, mientras los estamos importando de otros países. Nuestro posicionamiento es que tenemos que replantearnos la estrategia de extracción de materias primas dentro de un marco de economía circular completa. A día de hoy, solo con el reciclado no podríamos obtener todas las materias primas que necesitamos. Y pensamos que es mucho mejor hacerlo aquí por varias razones. Primero porque la regulación medioambiental es mucho más exigente y garantista y por tanto el impacto medioambiental será menor. Segundo porque supone negocio e industria, no nos olvidemos que no es solo la extracción, sino que después hay una actividad muy importante en los procesos industriales de procesamiento y refinado de la materia prima. Esto son puestos de trabajo locales y al final riqueza. Tercero porque creemos que redunda en muchos aspectos geopolíticos. Muchas de las tensiones que existen hoy en día a nivel mundial se deben al acceso a recursos. En la medida en la que podamos ser autosuficientes estaremos mucho más ajenos a ellas. Nosotros estamos apoyando en Europa a unos ocho proyectos de extracción, cada uno con sus circunstancias.

P: Una de ellas es la de San José de Valdeflórez en Cáceres.

R: En ese caso concreto Infiniti Lithium ha hecho una reformulación del proyecto que ahora plantea una extracción cubierta por lo que entendemos que el impacto medioambiental se va a ver reducido. En este proyecto lo que estamos es ayudando -con todos los requisitos medioambientales- y financiando un proyecto de innovación para que el proceso del refinado de litio sea económicamente más eficiente y medioambientalmente más sostenible que otros muchos que existen ahora.

P: ¿Se plantearían hacer algo similar con otros proyectos que pudieran surgir en España?

R: Sí, por supuesto.

P: Pero no se paran ahí, también están apoyando un proyecto de “hyperloop” español parecido al de Elon Musk.

R: Sí, es de una empresa radicada en Valencia que se llama Zeleros en la que hemos invertido recientemente. Es una tecnología que aún necesita mucho desarrollo para llegar al mercado, pero lo vemos con mucho potencial en el futuro. Zeleros está formada por gente muy joven, que ha salido de la Universidad Politécnica de Valencia y es impresionante lo que han conseguido hasta ahora. Tienen un futuro muy interesante por delante.