Los precios que pagan los españoles por productos básicos no se veían desde hace más de 30 años. La gasolina supera ya los 1,96 euros por litro (subida del 25,1%) y el diésel los 1,932 euros por litro (subida del 28,4%). Llenar el depósito cuesta casi un 36,58% más caro que hace apenas unos meses. En cuanto a la luz, cuesta casi un 1.000% más cara que hace unas semanas (subida del 80,5%). Ante esta situación, el Gobierno ha asegurado que habrá bajada de la luz, el gas y la gasolina el día 29.
La inflación se ha disparado hasta alcanzar el 7,6% en su tasa general de Índice de Precios al Consumo (IPC). Por ello, este fin de semana, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado algunas medidas para hacer frente a la escalada de precios, que incluyen rebajas impositivas para los sectores afectados, aunque no ha precisado más detalles.
La guerra entre Ucrania y Rusiaguerra Ucrania y Rusia, uno de los principales surtidores de petróleo de Europa, ha puesto la guinda a esta escalada económica. Los Veintisiete se reunirán el próximo 24 y 25 de marzo para tratar de desligar el precio del gas y de la electricidad y tratar de topar los de los carburantes.
El Gobierno aplicó una rebaja del 21% al 10% del IVA en la factura de la luz del año pasado, lo que se traduce en una recaudación de entre 10.000 y 12.000 millones de euros menos. La recaudación en este concepto ha caído un 16,8% ya, según los cálculos de Hacienda, así que el margen para más rebajas en este caso es escaso.
El Gobierno se ve limitado por el mercado mayorista en la electricidad, pero en el mercado de los hidrocarburos tiene mayor campo de acción. Hay dos medidas que se estudian para bajar el precio de la gasolina:
La rebaja en el impuesto de hidrocarburos es la opción que más urge, ya que la situación es crítica. Pero también hay voces críticas con esta opción. La recuperación económica tras la pandemia y la debilidad de las arcas hacen difícil la reducción de impuestos.
España es uno de los países europeos que menor carga fiscal aplica sobre la gasolina y el diésel. Los impuestos especiales resultan una fuente de ingresos muy considerable para las arcas estatales. De casi 12.500 millones de euros de recaudación que están previsto para el impuesto de hidrocarburos, 6.000 son para el Estado y 6.500 para las autonomías.