En España, la duración de la prestación contributiva por desempleo, comúnmente conocida como el “paro", depende del tiempo que hayas cotizado en los seis años anteriores a quedarte sin empleo. Para acceder a esta prestación, es imprescindible haber cotizado al menos 360 días en ese período. A partir de ahí, la duración de la prestación aumenta según el número de días cotizados.
El Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) utiliza una escala que establece la relación entre los días cotizados y el tiempo que se puede recibir el paro. Según esta tabla:
Este cálculo continúa aumentando de manera progresiva, hasta un máximo de 720 días de prestación (dos años), para aquellos que hayan cotizado 2.160 días o más en los últimos seis años.
Si no llegas al mínimo de 360 días cotizados, no tendrás derecho a la prestación contributiva, pero podrías solicitar un subsidio por cotización insuficiente. Este subsidio depende también del tiempo cotizado y de si tienes cargas familiares. Si has cotizado menos de seis meses, el subsidio durará lo mismo que los meses trabajados, mientras que, si has trabajado más de seis meses, el subsidio puede extenderse hasta 21 meses si tienes hijos a tu cargo.
El importe que se cobra durante el paro depende de la base de cotización de los últimos 180 días trabajados. Durante los primeros 180 días de la prestación, recibirás el 70% de esta base reguladora, mientras que a partir del día 181 la cuantía se reduce al 50% de dicha base.
Es importante tener en cuenta que existen límites mínimos y máximos para la cuantía que se puede cobrar. En 2024, el tope mínimo es de 560 euros mensuales para quienes no tienen hijos a cargo, y de 749 euros si se tiene al menos un hijo. En cuanto al tope máximo, se sitúa en 1.225 euros mensuales sin hijos, 1.400 euros con un hijo y 1.575 euros con dos o más hijos.
El tiempo que puedes cobrar el paro puede verse modificado por diversas circunstancias, como las interrupciones en la prestación o la reanudación del paro tras haber encontrado un empleo temporal. Estas situaciones, aunque no siempre comunes, pueden cambiar la duración total del subsidio al que tienes derecho.
La duración máxima del paro en España es de 720 días (dos años), independientemente de los días que hayas cotizado si superan los 2.160 días. Además, es importante tener en cuenta que el derecho a percibir el paro no está directamente condicionado por la edad del solicitante. Sin embargo, existen ciertas ayudas adicionales para personas mayores de 52 años que han agotado su prestación y que, en algunos casos, pueden acceder a un subsidio específico hasta alcanzar la edad de jubilación