En España, cuando una persona que se encuentra en situación de desempleo y está cobrando la respectiva prestación por desempleo entra en una situación de baja médica, la duda de si se consumen o no días de paro no tiene una respuesta clara. Y es que se trata de una situación que depende de varios factores, como el tipo de contingencia que provocó la baja y el estado de la relación laboral en el momento de producirse la baja.

En el caso de que el trabajador esté en situación de desempleo y se da de baja por una enfermedad común o un accidente no laboral, los días de baja médica efectivamente siguen consumiendo el paro que esa persona tenga acumulado. Esto se debe a que la prestación por desempleo sigue pagándose a través del SEPE también mientras dure la baja, lo que significa que los días de prestación se van agotando. Es decir, la persona sigue cobrando el importe de paro al que tiene derecho, pero con el tiempo reducido en consecuencia de su baja.

Si dicha baja se debe a una contingencia profesional, como un accidente de trabajo o una enfermedad vinculada a la ocupación que el trabajador tenía, la prestación por desempleo no se consume durante el periodo de baja médica. En esta situación, el pago de la baja está cubierto por la mutua laboral o el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS), con lo que se mantienen los días de paro para que puedan usarse tras recibir el alta médica pertinente.

Además, mientras una persona está de baja y además en situación de desempleo, se suspende la demanda de empleo, lo que significa que no sería necesario acudir a las citas de seguimiento, ni tampoco participar en posibles programas de formación. Sin embargo, lo que sí que es obligatorio sería presentar los partes médicos de baja y alta, ya que son estos los que justifican la situación y permiten la correcta gestión de la prestación contributiva.

Si el periodo de prestación contributiva termina antes de que el trabajador reciba el alta médica, existen dos opciones. En primer lugar, si la baja médica es por contingencia común, la Seguridad Social asume el pago de la prestación por incapacidad temporal, aunque en una cantidad reducida, equivalente al 80% del IPREM (Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples), hasta que el trabajador se recupere y pueda volver al mercado laboral.

Adicionalmente, en el caso de que la baja fuese causada por una contingencia laboral, la mutua mantiene el pago de la prestación hasta el alta, sin descontar tiempo del paro.

En conclusión, estar de baja médica consume días de paro en situaciones de enfermedad común o accidente no laboral, mientras que en casos de contingencias laborales, el tiempo de paro no se ve afectado. La consulta con un asesor o en el SEPE es recomendable para gestionar correctamente cada caso según la normativa vigente.