La ministra de Sanidad, Mónica García, ha abierto este sábado la puerta a negociar con el departamento de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones la propuesta de las bajas laborales flexibles del Gobierno porque considera que "hay una parte que tiene que ver con la defensa de la recuperación y de los derechos de los trabajadores".
"El acto médico de la baja médica no lo van a decir las empresas o (Antonio) Garamendi -presidente de la CEOE-", ha asegurado en declaraciones ante los medios de comunicación durante un evento organizado por Más Madrid en la capital española.
Por otra parte, la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) se ha mostrado a favor de la propuesta de crear bajas médicas flexibles, aunque subrayan que "habría que valorar cada caso" puesto que no a todas las personas les afectan por igual los tratamientos.
Mónica García ha puntualizado que existen ocasiones en las que los médicos estiman que la reincorporación al trabajo tiene que ser "paulatina", por lo que, en esos casos, podría existir "una medida intermedia".
Sin embargo, la ministra ha aseverado que una baja "no puede ser una herramienta de supuesta flexibilidad y voluntariedad" porque, avisa, podrían terminar viéndose "coacciones de las empresas" para que haya altas voluntarias de manera que los trabajadores vuelvan a sus empleos "antes de tiempo, redundando en un mal pronóstico de su salud".
De esta manera, la líder de Más Madrid se alinea con la posición de la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, quien pedía este pasado viernes "no jugar" con la salud de los trabajadores.
La idea sobre la mesa de la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, contempla modificar la regulación para hacerla más flexible, como se ha hecho con la compatibilidad de trabajo y pensión en el último acuerdo de pensiones.
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.