El IRPF es uno de los impuestos que sufrirán modificaciones durante 2021
Cambian los tipos aplicables a las rentas mas altas y las desgravaciones de planes de pensiones
Se prorrogan los límites vigentes del régimen de módulos de autónomos
El año que ahora comienza trae muchas novedades normativas, y algunas de ellas son de tipo fiscal. Son muchos los impuestos que cambian en 2021, en muchos sentidos distintos, y el IRPF es uno de ellos. Cabe recordar que el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas es el principal tributo de nuestro país en cuanto a recaudación, seguido del IVA: cada modificación al respecto puede suponer grandes diferencias en cuanto a la cuantía que acumulen las arcas del Estado. ¿Qué cambios trae el IRPF en 2021? ¿Qué otros impuestos cambian con el nuevo año?
¿Qué cambios trae el IRPF en 2021?
El IRPF cambia de cara a 2021 en distintos aspectos. La novedad más destacada se encuentra en la aplicación de distintos tipos o porcentajes a determinados tramos de ingresos. Así, se aplicará un aumento de dos puntos el IRPF para las rentas del trabajo de más de 300.000 euros, elevándose el tipo marginal al 47 por ciento. El incremento será de tres puntos para las rentas de capital de más de 200.000 euros, hasta el 26 por ciento, lo que, según el Ejecutivo, afectará a un número "reducido" de 36.194 contribuyentes (0,17 por ciento). Para Hacienda, esto supondrá un impacto de 491,4 millones de euros (144 millones en 2021 y 346 millones en 2022).
Además, también en área del IRPF, se reducirán las desgravaciones de planes de pensiones privados individuales a 2.000 euros la aportación máxima. A la vez, se eleva el límite conjunto de reducción (partícipe y empresa) de 8.000 a 10.000 euros en los planes de empresa, de forma que se potencian las aportaciones empresariales y se corrige la "regresividad" de estos beneficios. En concreto, se espera que con esta medida se aporte una recaudación de 580 millones en 2022.
Otra novedad es que se prorrogan los límites vigentes del régimen de módulos de autónomos para la aplicación de la estimación objetiva en el IRPF y en el IVA.
Cambios importantes en otros impuestos en 2021
El IRPF no es el único impuesto que experimentará cambios en 2021. Las novedades más relevantes se encuentran en la limitación de la exención sobre dividendos o plusvalías de filiales en el Impuesto sobre Sociedades, así como en el aumento de un 1 por ciento del Impuesto sobre el Patrimonio para determinados casos. También aumentará del 10 al 21 por ciento el IVA de bebidas edulcoradas.
De otro lado, como novedades fiscales en 2021 cabe mencionar la llegada de las tasas 'Google' y 'Tobin', un nuevo impuesto a los envases de plástico de un solo uso y otro a los residuos, así como un tipo del 15 por ciento a beneficios no distribuidos de las 'socimi', entre otros.
Estas son las novedades concretas:
Impuesto sobre el Patrimonio. Sube un 1 por ciento para patrimonios de más de 10 millones, hasta un tipo del 3,5 por ciento.
Impuesto sobre Sociedades. Se limita la exención en este impuesto sobre dividendos y plusvalías en filiales al 95 por ciento, lo que afectará a 1.739 empresas (0,12 por ciento), exceptuando a las empresas con facturación inferior a 40 millones durante los tres primeros años. La limitación aportará 473 millones en 2021 y 1.047 millones en 2022.
Seguros. Se incrementa del 6 al 8 por ciento el impuesto sobre las primas de seguros, aunque seguirá en el tramo bajo de la UE. Para el seguro a terceros de un automóvil, supondrá 6,20 euros más al año y para el seguro del hogar, unos 3,98 euros al año.
IVA. Además, se subirá al 21 por ciento el IVA de las bebidas azucaradas y edulcoradas, al tratarse de un "compromiso social para racionalizar el consumo responsable en la población infantil y juvenil" y combatir las dietas poco saludables. Eso sí, se exceptúa a los lácteos. El alza de la tributación afecta a la venta de estos productos en supermercados: la consumición en bares y restaurantes seguirá tributando al 10 por ciento, para no perjudicar al sector de la restauración. Por otro lado, se prorrogan los límites para aplicación del régimen simplificado y especial de agricultura, ganadería y pesca en el IVA. Con todos estos cambios, el Gobierno prevé recaudar 1.862 millones en 2021, el 0,8% del total de ingresos, y prevé 2.135 millones en 2022.
Impuesto de Matriculación. Aunque se ha descartado la reducción la bonificación del diésel para equipara su fiscalidad a la de la gasolina, sí subirá el Impuesto de Matriculación, ya que finaliza la moratoria de 2018 del WLTP (Procedimiento Mundial Armonizado para el Ensayo de Vehículos Ligeros), un sistema que determina las cifras de emisiones y consumo de los vehículos. Ello repercutirá en el precio de los vehículos nuevos y, previsiblemente, pagarán más por el impuesto de matriculación, al mostrar más emisiones.
Tasas ‘Google’ y ‘Tobin’. Con la tasa ‘Tobin', el Gobierno prevé recaudar 850 millones de euros anuales, gravando con un 0,2 por ciento las operaciones de adquisición de acciones emitidas en España de empresas cotizadas cuya capitalización bursátil sea superior a 1.000 millones de euros. No se gravará la compra de acciones de pymes y empresas no cotizadas. Por su parte, la tasa ‘Google' gravará a aquellas empresas con ingresos anuales totales de, al menos, 750 millones de euros y cuyos ingresos en España superen los 3 millones de euros, dirigiéndose a servicios de publicidad en línea, servicios de intermediación en línea y a la venta de datos generados a partir de información proporcionada por el usuario durante su actividad, o la venta de metadatos.
Lucha contra el Fraude. Entran en vigor también en 2021 las medidas de la Ley de lucha contra el Fraude, incluyendo la prohibición de las amnistías fiscales, la limitación a 1.000 euros de los pagos en efectivo para determinadas actividades económicas entre profesionales y empresas, la disminución a 600.000 euros del umbral para entrar el la lista de ‘morosos', o un mayor control sobre el uso de nuevas tecnologías como las criptomonedas.
Sicav y socimi. Por último, sobre las ‘sicav', se establecen requisitos adicionales para beneficiarse de su régimen especial. Por ejemplo, exigir a los accionistas una participación mínima de 2.500 euros y otorgar a Hacienda competencia para comprobar el requisito. Para las ‘socimi’, se establecerá un gravamen del 15 por ciento para beneficios no distribuidos.
Desde el Gobierno han defendido constantemente que los cambios e incrementos aprobados se dirigen a "rentas altas y grandes empresas" y son de "limitado alcance", dejando al margen a la clase media y trabajadora, sin perjuicio de que un comité de expertos se encargará de revisar las figuras para acometer en el futuro una reforma tributaria integral y reducir la brecha de recaudación de unos 7 puntos que calcula respecto a la media europea.