Angélica ya no tiene casa pero "no se va a quedar sola" afirma con rotundidad Ana Sánchez, portavoz del Ayuntamiento de Parla. La comitiva judicial ha ejecutado el lanzamiento (como se llama técnicamente al desahucio). Angélica y sus dos hijos de diez y cinco años, uno de ellos enfermo, no podrán volver a la casa. Pero esta vez no han tapiado el bajo del número 10 de la calle Alfonso X el Sabio de Parla. Y si no hay ladrillos, hay esperanza de que la puerta se vuelva a abrir.
La presencia de activistas hizo fracasar los cinco intentos anteriores. Esta mañana, a la hasta ahora vivienda de Angélica, acudieron una docena de furgonetas de la Policía Nacional. La zona estaba fuertemente custodiada por los antidisturbios y vallada para evitar que las protestas impidiesen actuar a la comitiva judicial.
El Ayuntamiento intentó mediar sin éxito con la comitiva judicial y trata de buscar un techo para Angélica y sus hijos. Lo más urgente, algo provisional para hoy mismo y, a partir del lunes, trabajar a medio y largo plazo. Están abiertos a todas las posibilidades, incluyendo negociar con el banco propietario de la casa.
El nuevo gobierno municipal de Parla se constituyó hace apenas ocho días. Aseguran que no han tenido margen de maniobra para actuar y hacer valer los informes médicos y económicos que acreditan la situación de vulnerabilidad de Angélica. La nueva corporación quiere que solucionar el problema de vivienda en la ciudad centre el esfuerzo de su mandato. También quiere evitar otro desalojo in extremis.