El caso es que el alto precio que se paga por los carburantes se refleja en algunos productos básicos. Rusia y Ucrania son de los principales exportadores de cereales. Por tanto, se espera un encarecimiento del pan y la bollería, pero también de la cerveza, hecha con cebada, o la carne y los huevos. El sector ganadero necesita piensos compuestos para producir. También es el caso del aceite de girasol, un 52% procede de los países en guerra, que en consecuencia podría subir el precio de las conservas. Así con todo, los expertos llaman a la tranquilidad.
La guerra de Ucrania impacta en el precio de los alimentos pero no habrá desabastecimiento. Lo asegura el presidente de Mercadona. "No hay problemas de desabastecimiento, ahora está pasando con algunos productos como el aceite pero es por el acaparamiento". Naciones Unidas calcula que un 30% del cultivo de grano de Ucrania no podrá labrarse por culpa de la guerra. Esto sumado a la prohibición de exportar para alimentar a su población provocará subidas de entre un 8 y un 22%, el más alto de la historia.
En España las harinas, cereales, el aceite y la carne son los productos que subirán más rápido por la guerra.
Precios disparados que aumentarán el hambre en el mundo. Y todo empeorará de junio a diciembre, y mas en los países que dependen del grano para subsistir".