El alza de los precios del aceite, la limitación en su venta y la carestía de aceite de girasol se han convertido en el caldo de cultivo perfecto para engañar a los consumidores. La Agencia de Seguridad Alimentaria (AESAN) ha alertado de la presencia de una red fraudulenta que vende como aceite de oliva lo que en realidad está hecho de semillas. Hasta el momento, este aceite se ha detectado en Murcia, Cataluña, País Vasco y Comunidad Valenciana.
La AESAN ha alertado de una red clandestina que se dedica a la elaboración, envasado y distribución de aceite, etiquetado como "aceite de oliva" o "aceite de oliva virgen extra" pero que en realidad no es tal, sino que es vegetal.
Los análisis de este aceite han dado como resultado que el aceite está hecho de semillas o mezcla de aceites vegetales de semillas, y en ningún caso de oliva. Este hecho puede suponer un riesgo para la salud, alertan desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), por estar generado de manera clandestina, sin trazabilidad fiable sobre su origen y composición.
El aviso ha llegado desde la Comunidad Autónoma de Murcia, pero aseguran que también tienen constancia de que se ha vendido en Cataluña, País Vasco y Comunidad Valenciana.
Hasta el momento no se han comunicado más comunidades afectadas, aunque el número podría aumentar en los próximos días.
Este aceite se ha vendido a través de varias marcas: Wafa, Maakoul, Riad Al Andalus, Maysae, La Noria, Zannouti, Virgen de la Salud y Rahouyi. Concretamente, este aceite se ha encontrado en:
Aunque no se tiene constancia de ningún problema de salud generado por estos aceites, se recomienda que aquellas personas que tienen estos productos en sus hogares los devuelvan a sus puntos de venta e intenten comprar únicamente productos de calidad distribuidos en canales regulares.