La Fiscalía Anticorrupción eleva la petición de penas por la salida a bolsa de Bankia a 8 años y medio de cárcel para Rodrigo Rato, y ha añadido falsedad contable al delito de estafa a los inversores. Aumenta en tres años y medio de prisión la petición previa, de cinco años que contemplaba únicamente el delito de estafa. Al principio del juicio, el Ministerio Público abrió la puerta al aumento de la petición de condena según se desarrollase el periodo de vista pública.
La fiscal Carmen Launa ha asumido los argumentos de una de las acusaciones populares, la de la Confederación Intersindical de Crédito (CIC), representada por Andrés Herzog, que pide penas de hasta 12 años de cárcel y multas millonarias para la entidad, su matriz, BFA, y la firma auditora Deloitte, imputada en el procedimiento a instancia suya.
El Ministerio Público, además, amplía el número de acusados, de cuatro a catorce personas. Hasta ahora eran solo Rodrigo Rato y otras tres personas (José Manuel Fernández Norniella, Francisco Verdú e Ildefonso Sánchez Barcoj). A partir de ahora se suman a otras ocho y a todas les atribuye falsedad contable además de estafa a los inversores. Entre ellos están el socio auditor de Deloitte Francisco Celma; el interventor de Bankia, Sergio Durá, y el exministro Ángel Acebes. Para este último pide año y medio de cárcel.
La fiscal pide la absolución de Bankia como responsable penal por la presunta estafa a inversores, aunque sí pide que respondan como responsables civiles Bankia, BFA (matriz de Bankia ) y Deloitte.
Rodrigo Rato esperará la sentencia en la prisión de Soto del Real (Madrid) donde cumple cuatro años y medio por el caso de las 'tarjetas black'. La sala de la Audiencia Nacional presidida por Ángela Murillo tendrá que dictar sentencia y determinar si asume como condena la petición fiscal de ocho años y medio por la salida a bolsa de Bankia. No es la última cita con la justicia de Rato. Está pendiente de fecha el juicio por la gestión de su fortuna personal. La instrucción de los juzgados de Plaza de Castilla terminó en acusación a Rodrigo Rato por los delitos de corrupción entre particulares, blanqueo y fraude.