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A partir de hoy los trabajadores de la construcción podrán tomarse un pequeño respiro. En previsión de las altas temperaturas tienen que acabar de trabajar, como muy tarde, a las tres de la tarde. Se pone en marcha la jornada reducida en la construcción, que va a durar todo el verano.
La reducción de jornada de los trabajadores de la construcción que empieza hoy es la más larga que ha habido nunca en Andalucía, hasta 57 días, según nos cuenta Marta Machón en el vídeo.
Los obreros tendrán que empezar a trabajar a las siete de la mañana y acabarán a las 15 horas como muy tarde. Son jornadas de siete horas que cobrarán como ocho.
E objetivo es evitar los riesgos que pueden ocasionar las altas temperaturas, especialmente en Andalucía, como insolaciones o golpes de calor.
Además, durante las alertas amarillas o rojas, la jornada de trabajo en la construcción podría reducirse aún más o incluso suspenderse.
Ya el año pasado algunas empresas fueron sancionadas por la inspección de trabajo, incluso por tener a empleados trabajando solo 15 minutos más allá de lo permitido.
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