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El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones permitirá recuperar las prácticas no cotizadas aplicando la base de cotización del año en el que se realizaron, y no la actual, lo que supondrá una reducción en el importe a abonar, que en muchos casos ascendía a 17.000 euros.
La ministra de Inclusión, Elma Saiz, este lunes presentará esta propuesta a los agentes sociales, tras haberse reunido la semana pasada con más de una decena de representantes de asociaciones científicas, el colectivo más afectado por esta norma, según una entrevista en La Vanguardia publicada este lunes.
"Después de una semana de reuniones, hemos decidido flexibilizar las condiciones", dice la ministra, después de que el lunes de la semana pasada el secretario de Estado de Seguridad Social, Borja Suárez, mostrara la disposición del Ministerio a "adoptar medidas adicionales" para rectificar la regulación de la cotización retroactiva de los becarios de investigación, como reclamaban.
El pasado 1 de mayo el Boletín Oficial del Estado (BOE) publicaba la orden que regularizaba la cotización retroactiva de los becarios, con la que podría recuperar hasta cinco años de prácticas no cotizadas, aplicando la base de cotización actual.
La orden explicaba que la base de cotización de este convenio especial será la actual mínima de cotización por contingencias comunes correspondiente al grupo 7, a la que se aplicará un coeficiente reductor del 0,77, algo menos de 290 euros por cada mes recuperado. Sin embargo, para muchos antiguos becarios que trabajaron durante décadas en esas condiciones eso podría traducirse en miles de euros.
La propuesta que esta tarde presentará el Ministerio a patronal y sindicatos en la mesa de diálogo social sobre pensiones incluye también una ampliación de los años a recuperar para los que ya lo hubieran hecho en 2011, cuando se abrió una oportunidad para lograr hasta dos años más de vida laboral.
El Ministerio ampliará el plazo de dos años para solicitar la recuperación, así como el periodo para pagar las cuotas, ya que la orden recogía que el importe se debería abonar "en un pago único o fraccionado en un número máximo de mensualidades igual al de aquellas por las que se formalice el convenio".
La comunidad científica arrastraba problemas con las becas de investigación que se resolvieron en parte en 2011, cuando una nueva ley obligaba a que las becas se consideraban contratos de trabajo , además del derecho a paro y asistencia sanitaria.
Los becarios científicos que trabajaron con becas antes de esa fecha, sin embargo, no han opciones para solucionar los años anteriores a la ley. Ahora, cuando la fecha de jubilación se acerca para algunos han llegado las reivindicaciones que se han centrado en conseguir la cotización retroactiva de esas becas.
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