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Más de tres millones de funcionarios, personal laboral y empleados públicos verán más abultada la nómina el próximo mes de mayo. La subida del 2% que acordó el Gobierno con CCOO y UGT se está tramitando como proyecto de ley en las Cortes a través de una enmienda al Real Decreto-Ley de medidas urgentes para luchar contra la crisis originada por la guerra de Ucrania y está previsto que se cierre en el mes de abril. Este incremento tendría efectos retroactivos desde el 1 de enero de 2024 y podría sumar otro 0,5% si se cumplen los condicionantes asociados al IPCA.
Cabe recordar que el Gobierno pactó con CCOO y UGT una subida de hasta el 9,5% entre 2022 y 2024 para los trabajadores públicos en el Acuerdo Marco para una Administración del siglo XXI. Además, en dicho acuerdo, se recogía un incremento salarial fijo del 8% y uno variable del 1,5% ligado a la evolución de la inflación y del Producto Interior Bruto (PIB).
En 2022 y 2023, se cumplieron los objetivos salariales máximos recogidos en dicho acuerdo marco. Sin embargo, el 2% previsto para 2024 se retrasó por la falta de unos nuevos Presupuestos Generales del Estado (PGE) para este año, ya que se prorrogaron los de 2023.
Ante esta situación, en el mes de marzo, el ministro para la Transformación Digital y de Función Pública, José Luis Escrivá, confirmó que la subida del 2% se incluiría en una enmienda al Real Decreto-Ley de medidas urgentes para luchar contra la crisis originada por la guerra de Ucrania.
La propuesta de modificación legislativa, a la que entonces tuvo acceso Europa Press, incluye un nuevo artículo al texto para aprobar el incremento retributivo del personal al servicio del sector público en 2024.
Informaron de que el proyecto de ley derivado del decreto se aprobaría en las semanas siguientes en la Comisión de Hacienda, para remitirse después al Senado y estar en vigor aproximadamente en abril. Por tanto, los trabajadores no lo percibirían hasta mayo, un mes en el que notarán especialmente esta subida al recibir el incremento con efectos retroactivos.
Un mes después, el 12 de abril, Escrivá aseguraba que la subida salarial estaría “lo antes posible que encontremos el instrumento legislativo”. “Estamos en un periodo, como sabe, difícil. Por los procesos electorales, pero buscaremos el instrumento legislativo adecuado que podamos llevarlo", dijo en los Desayunos Informativos de Europa Press.
Cabe destacar que es probable que la subida final vaya a ser no del 2% sino del 2,5%, ya que ese 0,5% adicional se condiciona a que la suma de la variación del IPC armonizado entre 2022 y 2024 supere al incremento retributivo fijo acumulado de ese periodo, algo que a falta de conocer la inflación de este año ya ha sucedido.
Y es que, la inflación armonizada entre 2022 y 2023 ha sido del 8,8%, mientras que la subida fija de los sueldos públicos alcanza el 8%. Sin embargo, la redacción del artículo establece que esto no se consolidará hasta el año que viene, cuando el Instituto Nacional de Estadística publique los datos del IPC armonizado de 2024.
Si finalmente la inflación supera a la subida de los salarios, como se espera que pase, el Consejo de Ministros aprobará la subida adicional de 0,5 puntos, que tendría efectos retroactivos desde el 1 de enero de 2024.
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