Un fallo informático registrado este miércoles en la red de Volkswagen en su sede mundial de Wolfsburgo, al norte de Alemania, ha paralizado la producción de sus vehículos en el país. El problema también ha afectado a otras plantas del grupo fuera de Alemania.
El alcance total de la interrupción aún no está del todo claro, sobre todo porque algunos países no están produciendo actualmente debido a la diferencia horaria, según señala el diario alemán 'Handelsblatt', que apunta que Volkswagen ha convocado un comité de crisis.
Por ahora se desconocen las causas de este fallo, aunque se descarta por el momento que se haya debido a un ataque informático. Un portavoz de la compañía señaló a Reuters que "es poco probable que un ataque externo sea la causa del mal funcionamiento del sistema".
Según recoge Reuters, la interrupción de la producción ha afectado a las plantas alemanas de Emden, Osnabrueck, Hannover, Dresde y Zwickau, así como a las fábricas de componentes de Braunschweig, Kassel, Chemnitz y Salzgitter.