Muchas de las personas que tienen vacaciones durante la segunda quincena de este mes de julio ya se encuentran en sus destinos. Por cierto, que el periodo estival es un buen momento del año para mejorar el estilo de vida.
A pesar de los precios de los transportes, los hoteles o los restaurantes, que harán que sea uno de los veranos más caros, los españoles parecemos dispuestos, en la medida de lo posible, a destinar parte de nuestro presupuesto a tratar de disfrutar por unos días.
Los turistas se mueven en una segunda gran oleada que confirma que el sector está a tope y en la que el cliente nacional toma más importancia. E irá a más puesto que abarrotará los principales destinos de ocio y descanso durante el mes de agosto.
El Banco de España ha detectado apuros en muchas familias y una caída general del ahorro. Sin embargo, en en el mismo informe, observa un aumento de los créditos personales, que son más caros pero permiten mantener los planes a corto plazo.
En muchos casos, según los expertos, ese dinero es para darse un respiro y para disfrutar sí o sí de vacaciones. El caso es que el turismo -incluso en estos tiempos difíciles- ha cerrado el primer semestre con un crecimiento de su PIB del 16% con respecto a 2019 y espera, aunque algo más moderadamente, mantener el ritmo.
Por saber un poco más. ¿A qué destinarán su dinero quienes viajan? En la lista aparecen restaurantes, hoteles y apartamentos, compras, cine y deporte, por este orden.