El panel de Beatriz Benayas: en qué productos se ha notado y en cuáles no la rebaja del IVA
Las harinas y otros cereales, junto con aceites comestibles distintos al de oliva, los alimentos con una bajada del IVA rebajados en febrero
El IPC sube al 6% en febrero, aunque los alimentos siguen disparados hasta el 16,6%
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El IPC de febrero ha subido una décima hasta el 6 por ciento, con lo que neutraliza la rebaja del IVA aprobada por el Gobierno para determinados alimentos. Con todo, lo peor es que la inflación subyacente, que descarta energía y alimentos frescos, está en el 7,6 por ciento, la más alta en 37 años. El efecto de la bajada del IVA no se percibe en los supermercados.
Las harinas y otros cereales, junto con otros aceites comestibles distintos al de oliva, fueron las únicas dos categorías de alimentos con una rebaja o supresión del impuesto sobre el valor añadido (IVA) que se abarataron en febrero respecto al mes anterior.
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Así se desprende de los datos difundidos este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que muestran que seis de los catorce grupos de alimentos con el IVA reducido o eliminado disminuyeron de precio desde enero, cuando entró en vigor la medida fiscal del Gobierno. Una radiografía diferente a la de enero, el primer mes de aplicación de la rebaja de ese impuesto, cuando casi todos los alimentos a los que se les aplicó bajaron de precio respecto a diciembre, excepto el arroz y las legumbres y hortalizas frescas.
El efecto yoyó de los precios en febrero
En este segundo mes de aplicación, en febrero, los precios de los alimentos y las bebidas no alcohólicas subieron el 16,6 % en comparación con el mismo mes de 2022, más de un punto por encima de la tasa interanual del pasado enero.
Para contener la inflación alimentaria, el Gobierno decidió, en su último paquete de medidas contra los efectos de la guerra en Ucrania, suprimir el IVA durante seis meses al pan común y a las harinas panificables; la leche, los quesos y los huevos, así como las frutas, las verduras, las hortalizas, las legumbres, los tubérculos y los cereales que fueran productos naturales o frescos.
Además, el Ejecutivo redujo el IVA del 10 al 5 % a los aceites de oliva y de semillas, y a las pastas alimenticias.
De todos esos alimentos, otros aceites comestibles se abarataron el 2,5 % en febrero respecto a enero, mientras que la bajada fue del 0,4 % para las harinas y otros cereales. El resto se encareció.
Entre las mayores subidas mensuales de precio estuvieron las de legumbres y hortalizas frescas o refrigeradas (+11,2 %) y las frutas frescas o refrigeradas (+5,4 %). En los dos primeros meses del año, las legumbres y hortalizas frescas acumularon un aumento de precio del 11,3 %, seguidas del arroz (+5,9 %), el aceite de oliva (+1,5 %) y las patatas (+1,3 %).
Entre los productos que se abarataron desde enero, destacaron otros aceites comestibles (-8,5 %), las pastas alimenticias y el cuscús (-3 %), las harinas y otros cereales (-2,7 %) y las legumbres y hortalizas congeladas (-2,2 %).
En cuanto a la variación anual, todos los productos con reducción y supresión del IVA mantuvieron incrementos de dos dígitos respecto a febrero de 2022, salvo las frutas frescas o refrigeradas, con una subida del 5,6 %.
El aceite de oliva continuó siendo el alimento básico que más se ha encarecido en un año (+33,5 %) y por detrás le siguieron la leche entera (+33,2 %), la leche desnatada (+33,1 %) y los huevos (+28 %).