CEVISAMA vuelve a abrir sus puertas después de dos años sin poder celebrarse a causa de la pandemia y de la posterior guerra de Ucrania. El certamen líder del sector cerámico vuelve a concentrar a las empresas del sector que siguen inmersas en una gran incertidumbre debido a la crisis energética y a la subida del precio de las materias primas.
Esta edición va a contar con 80.000 m² de Feria Valencia y concentrará a más de 500 empresas del sector, un sector muy afectado por la crisis que ha provocado más de 1.000 despidos y que tiene a más de 11.000 personas en ERTE.
Desde la patronal ASCER denuncian que las ayudas facilitadas por el Gobierno “siguen sin llegar y tampoco se esperan”, unas ayudas que según confirma la patronal, sí han recibido sus principales competidores, algo que provoca que hayan ido ganando cuota de mercado.
La inauguración ha contado con la presencia del presidente de la Generalitat, Ximo Puig, quien después de visitar la exposición ha asegurado a su atención a los medios una propuesta a corto plazo “para poder ejecutar ayudas acogiéndonos a aquello que sí que se puede hacer, los créditos bonificados” con tal de ayudar al sector. Además ha querido lanzar un mensaje de apoyo pidiendo que “cuenten con la Generalitat Valenciana”.