El Consejo de Ministros ha aprobado la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) para situarlo en 1.080 euros brutos en 14 pagas; un incremento pactado con los sindicatos, pero sin los empresarios, reticentes pese al encarecimiento vertiginoso de los precios especialmente en el último año.
La subida, que sitúa al SMI en el valor más alto que ha tenido nunca, beneficia a unos 2,5 millones de trabajadores y tiene además efectos retroactivos desde el pasado 1 de enero, situándolo en el objetivo del 60 % del salario medio.
Con este alza, de un de un 8 % con respecto al 2022, el Gobierno cumple su promesa de acercar más el SMI al salario medio del país, aunque los sindicatos CCOO y UGT reclamaban una subida del 10%, hasta 1.100 euros, mientras que la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, había abogado por la banda alta del informe del comité de expertos, que planteó un alza para 2023 de entre el 4,6 % y el 8,2 %.
La subida aprobada, no obstante, no ha sido fácil. Llega tras más de un mes de negociación y sin el concurso de la patronal CEOE. Por eso, en este sentido, el presidente, Pedro Sánchez, ha pedido responsabilidad a los empresarios para que, además de subir el salario mínimo interprofesional pacte con los sindicatos una subida salarial generalizada para acompasar los sueldos a los elevados precios.
En los último cinco años, el SMI ha subido un 47 %, o lo que es lo mismo, 344 euros mensuales desde los 736 euros de 2018. Frente al alza del 8% aprobado para este 2023, la COE de Antonio Garamendi, –que con la revisión de su contrato de alta dirección se embolsará cerca de 400.000 euros al año–, optaba por un incremento del 4% supeditado a establecer un régimen de deducciones aplicables al sector agrario y a modificar la normativa de revisión de precios en los contratos con el sector público para poder repercutir la subida del SMI en los contratos en ejecución.
El ascenso del SMI suma 568,32 millones de euros a los ingresos por cuotas de la Seguridad Social, según las proyecciones recogidas en el análisis de impacto de la norma.
En esa memoria también se destaca que, tras las últimas subidas del SMI, España se sitúa en la parte alta del grupo medio de nivel de SMI en la UE, acorde con su PIB per cápita.
Con este incremento, el salario mínimo diario queda fijado en 36 euros, el mensual en 1.080 euros y el anual en 15.120 euros.