Qué trucos usan los supermercados para que gastemos más
Los supermercados pueden convertirse en verdaderos campos de técnicas de marketing que resultan difíciles de esquivar
Además de aprender a reconocerlas, es importante que vayas a comprar con una lista y un presupuesto aproximado para evitar excesos
Los consumidores ahorrarán un 10% en la cesta básica por la bajada del IVA, más de 3,5 euros de media
No es ningún secreto que los establecimientos utilizan técnicas de marketing más o menos depuradas para hacernos comprar más de la cuenta. En el caso de las grandes superficies, prácticamente nada es casual: la iluminación, la música, la disposición de espacios y productos, el orden y altura en el que éstos se colocan, el diseño de ofertas... Hay que ir muy alerta para no caer en el camino de 'trampas' que los especialistas en marketing diseñan para nosotros y, sobre todo, no confiarse: no es casualidad que, por ejemplo, los productos cambien de sitio cada cierto tiempo para 'despistarnos' y obligarnos a recorrer todo el supermercado. Toma nota de algunos de los trucos que usan los supermercados para que gastemos más.
Qué trucos usan los supermercados para que gastemos más
MÁS
Precisamente uno de los trucos que utilizan los supermercados para hacernos comprar más de lo necesario e incluir productos en la cesta de la compra que inicialmente no pensábamos adquirir consiste en cambiarlo todo de sitio.
Por eso es frecuente que, de la noche a la mañana, los productos de cierta categoría se encuentren en una zona distinta y que, en consecuencia, ese espacio que tan frecuentemente recorres deje de resultarte tan familiar. Ello te obligará a tener que recorrer pasillos que tal vez no transites demasiado, y aportará un halo de novedad y de atención extra a tu recorrido, haciendo menos mecánica tu compra. Ten cuidado porque esa 'creatividad' puede costarte cara.
Los supermercados también juegan en ocasiones a 'esconder' sus cajas de pago, de forma que tengamos que recorrer todo el establecimiento y sus pasillos para llegar a ellas. Se trata de una forma bastante obvia de hacernos pasar más tiempo dentro del recinto, pero indudablemente funciona, porque de un modo u otro tendremos que salir de allí. Sin embargo, puede que los más sensibles a los espacios cerrados o los que lo pasen mal a la hora de orientarse en este tipo de lugar terminen por cansarse y elegir lugares menos laberínticos.
También podrás comprobar cómo los productos que todos compramos necesariamente se encontrarán en puntos más recónditos, precisamente porque necesitarás acceder a ellos y, por el camino, te encontrarás con todo tipo de productos más accesorios que intentarán llamar tu atención. Tampoco es casual la altura a la que se colocan los productos. Si se encuentran a la altura de tu mirada, ten claro que ello se debe a que se trata de los productos cuya venta quiere impulsarse por cualquier motivo.
Lo mismo se aplica si se encuentran a la altura de los niños: aquellos alimentos atractivos para ellos tienden a colocarse a una altura inferior y al alcance de su mano. Ten cuidado también con los productos que se encuentran en caja: no es causalidad que se encuentren ahí y pueden resultar especialmente tentadores.
Si lo que quieres es evitar que la lista de la compra se amplíe, lo primero que debes hacer es elaborarla: toma nota de todo aquello que necesitas y no te permitas comprar nada que se salga de ella (a no ser que hayas olvidado algo importante). Márcate también un presupuesto y ve haciendo una cuenta mental aproximada de lo que contiene tu carro, analizando bien los precios de cada producto.