El euríbor continúa subiendo sin descanso. Este mes de octubre se ha situado en un 2,629%, lo que supone un 3,106% más que en octubre de 2021, cuando marcó -0,477%. Esto significa que a las personas que les toque revisar este mes les tocará destinar más dinero del habitual a la cuota mensual de la hipoteca.
No obstante, no son los únicos que han sufrido una subida en su cuota este 2022. Es importante recordar que el año pasado el euríbor estuvo en negativo y que en abril de este año volvió al umbral positivo (ese mes marcó un 0,013%), por lo tanto, son muchos los usuarios que se han visto afectados por la tendencia que lleva el euríbor desde entonces.
De hecho, teniendo en cuenta los datos desde que el euríbor volvió al terreno positivo (abril) hasta el mes de octubre, los propietarios con una hipoteca de 150.000 euros con un interés del euríbor +0,99% van a tener que pagar de media unos 116,01 euros más al mes, lo que se traduce en 1.392 euros más al año.
Por su parte, si la hipoteca es de 300.000 euros la media se eleva hasta los 232,02 euros al mes, es decir, 2.784,24 euros más al año.
El euríbor ha subido sin descanso
Al comparar los datos de este año con los del año pasado se puede observar que, mientras el año anterior iba hacia abajo y a un ritmo tranquilo (oscilaciones del 0,01%), este año ha subido desbocado. Este gráfico muestra esa subida y, en definitiva, el cambio que se ha dado de 2021 a 2022.
No obstante, parece que esta última etapa del año va a echar un poco el freno. “El crecimiento se ha ralentizado este último mes. Entre agosto y septiembre el incremento fue de casi un punto y este mes se ha reducido a 0,393 puntos. Si nos fijamos en la tendencia de otros años, a final de año el euríbor moderaba siempre un poco su crecimiento”, asegura el director de Hipotecas del comparador y asesor hipotecario iAhorro, Simone Colombelli.
Entonces… ¿Cómo cerrará el año el euríbor? Es difícil saberlo, pero el portavoz de iAhorro estima que acabe “entre el 3,2 y 3,5%”. También hay que tener en cuenta que se rumorea que el Banco Central Europeo (BCE) quiere que los tipos lleguen al 2,5% en marzo de 2023, por lo tanto, puede que se aplique otra subida como la que se dio el pasado jueves 27 de octubre.
La subrogación sigue siendo una buena solución
Teniendo en cuenta que el euríbor va a seguir subiendo en lo que queda de año una de las alternativas que se puede estudiar es cambiar una hipoteca variable a una fija a través de una subrogación. Pese a que el interés de las fijas haya subido comparando con el año anterior sigue mereciendo la pena plantearse esta posibilidad.
“Coger ahora una hipoteca fija un poco cara y aguantar dos o tres años para cambiarla por otra mejor”, aconseja Colombelli. Al fin y al cabo, trasladarse a una hipoteca fija no significa que el usuario tenga que mantenerse en ese cambio para siempre. En un futuro puede volver a modificar el préstamo para tener un interés más competitivo.
Sin embargo, ahora ya no es tan fácil subrogarse como lo era hace unos meses, cuando el euríbor no se había situado por encima del 2%. “Ahora las entidades quieren hacer de la hipoteca variable su producto estrella y están encareciendo mucho la hipoteca fija para hacerla menos atractiva”, explica el director de hipotecas de iAhorro