Tras el duro invierno que nos acarrea la guerra de Ucrania y Rusia con los precios disparados que se superan cada semana debido a la inflación, son muchos los que quieren ahorrar un poco optando por cambiar su tarifa del gas a una regulada. Pero muchos están viviendo una completa odisea al intentar contratarlas, ya que como aseguran desde el Ministerio de Transición Ecológica, ha habido un tsunami de solicitudes y "la atención al cliente es la misma", la cual no es suficiente, por lo que están sembrando el infierno de muchos consumidores, que pasan horas ante el teléfono esperando una respuesta pero la cual es "imposible" debido al aluvión de llamadas que colapsan las líneas.
Para acabar con esto, las principales compañías han decidido aumentar su número de trabajadores al frente de la atención al cliente según recoge elDiario.es: “como la previsión es que este cambio continúe y el volumen de solicitudes crezca, estamos reforzando nuestros canales de atención y lo seguiremos haciendo, especialmente el canal telefónico”, asegura Endesa, quien también ha señalado que actualmente su tiempo medio de espera en las llamadas telefónicas es de unos 3 minutos. “De forma puntual puede producirse algún pico en hora punta y por esto tenemos en marcha un plan de refuerzo de nuestra capacidad operativa con el objetivo de facilitar el cambio a los clientes que quieran hacerlo”.
Aunque en la práctica no es así, hay personas que han llegado a tener que esperar durante más de una hora en la que su única comunicación con la empresa era a través de una máquina que le comunicaba que todos los agentes estaban ocupados en ese momento. Con el paso del tiempo, la llamada generalmente acabaría contándose, volviéndose a iniciar nuevamente el proceso. En otros casos, en los que la comunicación no se corta automáticamente, son los propios interesados quienes la terminan cansados de esperar durante horas para cambiar su factura del gas, para finalmente acudir a las oficinas "para ver si aclaran algo más".
Para acabar con esta situación, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha confirmado que "se están enviando requerimientos" contra las energéticas con licencias españolas para que aclaren "cómo están atendiendo las solicitudes". Además, desde la plataforma también han iniciado una investigación dónde se están analizando los tiempos de espera y los medios que cada empresa han destinado a los servicios de atención al cliente.