Primer fin de semana de otoño, y el balance demuestra que se ha llegado a conseguir un extraordinario verano en materia turística en España, en el que se han recuperado los niveles de ocupación hotelera de los años anteriores a la pandemia. En Galicia, se han mejorado los datos de ocupación de hace tres años, de 2019.
El verano ha sido histórico en Galicia, con una ocupación media en el mes de Agosto del 90%. Galicia se consolida como uno de los destinos preferidos por el turismo nacional. Ocupaciones similares han tenido este verano otros de los destinos más solicitados como las costas Brava y Dorada en Cataluña, la costa Blanca en la Comunidad Valenciana, la malagueña Costa del Sol, Baleares o Canarias.
La recuperación en el sector turístico es ya un hecho, las cerca de 90 millones de pernoctaciones en julio y agosto lo atestiguan. Se bate además algún récord, como en Galicia que ha registrado los ingresos más altos, casi 100 millones de euros, de su historia.
Las islas reciben el volumen más alto de turistas extranjeros, mientras que la Costa Brava, Andalucía y la Comunidad Valenciana registran ocupaciones por encima del 90%. El turismo rural baja un poco respecto al año pasado. Esta temporada, con el covid en segundo plano, ha dejado de ser refugio y, sufre, más que el resto del sector, los elevados costes asociados a la crisis energética y a la invasión a Ucrania.