Con la subída del precio de los combustibles, la primera operación salida de verano de este año será la más cara de la historia. Llenar un deposito de un vehículo con gasolina o diésel será de media entre 41 y 47 euros más caro que hace un año, según los datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea.
Se prevé que la primera operación salida del verano tenga lugar este viernes a las 15:00 horas, se estiman aproximadamente 4,5 millones de desplazamiento.
Si se toma como referencia un depósito medio de 55 litros, llenarlo por completo con diésel esta semana tiene un coste medio en España de 115,5 euros, es decir, casi 47 euros más que hace un año (68,54%). En cambio, si lo que se reposta es gasolina 95, el encarecimiento es del 53,87% dado que llenar el depósito cuesta, de media, 117,04 euros, frente a los 76,06 euros de hace un año.
Según los datos del Boletín Petrolero de la UE, España se sitúa en la octava posición dentro del ranking de precios medios de la gasolina más caros entre los países de la Unión Europea con 2,128 euros por litro, un nivel nunca visto hasta ahora en el país. De entre los 27 países del bloque, los precios de España solo se ven superados por los de Finlandia (2,523 euros por litro), Dinamarca (2,435), Grecia (2,4), Países Bajos (2,336), Suecia (2,181), Irlanda (2,169) y Estonia (2,147).
En el lado contrario, y más allá de las Islas Canarias, donde se disfruta de un impuesto sobre los combustibles distinto al del resto del país, los precios en la Península más baratos se sitúan entre los 1,7 y los 1,8 euros por litro.
Asimismo, el Gobierno ha prorrogado hasta el 31 de diciembre de 2022 la bonificación de 20 céntimos por litro de combustible con carácter general, una medida en vigor desde el pasado 1 de abril y que en principio solo iba a aplicarse hasta el 30 de junio.
También la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha confirmado que el Gobierno está estudiando crear nuevos impuestos en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2023 que reduzcan los posibles beneficios extraordinarios de las compañías energéticas en la electricidad, el gas o los carburante.
Ribera sostuvo que el Ejecutivo analizará "si necesitamos una fiscalidad adicional para las eléctricas y si hace falta para el gas y el petróleo".